En medio de la ola de deportaciones, ordenada por el presidente Donald Trump para los inmigrantes ilegales en Estados Unidos, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) puede aplicar una expulsión acelerada a ciertos grupos de indocumentados.
Normalmente, luego de que un inmigrante es detenido para ser deportado, se realiza todo un proceso ante un juez de inmigración con audiencias en las cuales se determinarán si califica o no para ser repatriado a su país de origen.
Sin embargo, con la expulsión o deportación acelerada, el ICE puede aplicar la deportación de manera rápida, sin ningún tipo de audiencia. El portal web de los abogados de National Inmigration Law Center, explica que “este proceso se utiliza principalmente para aquellos que no han estado en el país por mucho tiempo o que no tienen una base legal sólida para permanecer en el país”.
Por lo general, la expulsión acelerada, no es apelable e impide volver a Estados Unidos por cinco años.
Según el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, en el primer mes de gestión del presidente Trump, deportaron a 37.660 inmigrantes, pero se desconoce cuántos de éstos fueron por deportación o expulsión acelerada.
Un informe de Witness at the Border reveló que los principales países a donde Estados Unidos lleva a los deportados son Guatemala, Honduras y El Salvador. Le siguen México, Colombia y Ecuador. Finalmente, naciones de África, como Mauritania, Kenia y Camerún, y también India.
Características de inmigrantes que califican para una expulsión acelerada
Según National Inmigration Law Center, el ICE puede aplicar la expulsión acelerada a personas aprehendidas en la frontera, durante una operación de control migratorio, o en un centro de detención.
Entre los inmigrantes que clasifican para una expulsión acelerada en Estados Unidos, se encuentran:
-Quienes no tengan documentos válidos.
-Personas sin autorización legal para estar en el país.
-Aquellos que no puedan demostrar permanencia continua en Estados Unidos por al menos dos años.
-Los que más tienen probabilidad de una expulsión o deportación acelerada son los detenidos cerca de la frontera, porque ni siquiera han ingresado por completo a Estados Unidos, y el gobierno quiere evitar que se queden sin permisos.
-Quienes tengan antecedentes penales y estén siendo procesados por una infracción migratoria. Este grupo es otro de los más propensos a una expulsión acelerada.