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Joe Biden indulta a su hijo Hunter previo a la posibilidad de ser sentenciado federalmente por delitos graves

El presidente estadounidense tomó la decisión a pesar de sus promesas previas de no hacerlo

El presidente Joe Biden indultó el domingo a su hijo, Hunter, evitándole que pueda enfrentar una sentencia de prisión por condenas federales de delitos graves relacionados con posesión de armas y evasión fiscal, dejando de lado sus promesas previas de no utilizar las facultades extraordinarias de la presidencia para beneficiar a miembros de su familia.

El mandatario había dicho previamente que no indultaría ni conmutaría la sentencia de su hijo después de que fue declarado culpable en los dos casos en Delaware y California. La decisión se produce apenas unas semanas después de que Biden recibió sentencia por el caso relacionado con tenencia de armas de fuego y se declaró culpable por cargos fiscales, y menos de dos meses antes de la toma de posesión de Donald Trump.

Esto pone fin a una larga saga legal para el hijo del presidente, quien reveló públicamente que era objeto de una investigación federal en diciembre de 2020, un mes después del triunfo electoral de su padre, y arroja una sombra sobre el legado del presidente. Biden, quien en repetidas ocasiones prometió a los estadounidenses que restauraría las normas y el respeto por el estado de derecho después del primer mandato de Trump, finalmente usó su posición para ayudar a su hijo, rompiendo su promesa pública a la ciudadanía de no hacer tal cosa.

En un comunicado emitido el domingo por la noche, el mandatario indicó que “creo en el sistema judicial, pero a medida que he debatido este tema, también pienso que la política ha infectado este proceso, lo que lo ha conducido a un mal uso de la justicia”. El indulto general del presidente no solo cubre los delitos de armas y fiscales contra el Biden más joven, sino también cualquier otro “delito contra los Estados Unidos que él haya cometido o pueda haber cometido o participado durante el período desde el 1 de enero de 2014 hasta el 1 de diciembre de 2024″.

Biden descartó categóricamente un indulto o clemencia para su hijo en junio pasado, y tras el juicio a Hunter en Delaware por tenencia ilegal de armas de fuego, dijo a los periodistas que “me atengo a la decisión del jurado. Eso es lo que haré y no voy a indultarlo”.

Apenas el 8 de noviembre, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, descartó un indulto o clemencia para el hijo del mandatario, diciendo: “Nos han hecho esa pregunta varias veces. Nuestra respuesta sigue siendo la misma: no”.

El mandatario ha defendido públicamente al único hijo que le queda con vida mientras Hunter caía en una grave adicción a las drogas y sumía a su familia en un caos, antes de enmendar el camino en los últimos años. Sus rivales políticos han utilizado desde hace tiempo la gran cantidad de errores de Hunter Biden como herramienta política contra su padre: En una audiencia, los legisladores mostraron fotos del hijo del presidente, en las que aparecía medio desnudo y en un hotel de mala monta.

Además, los representantes republicanos trataron de usar los negocios cuestionables de Biden en el extranjero en un intento que han dejado de lado por destituir al presidente, quien ha negado su participación en los negocios de su hijo o haberse beneficiado de ellos de alguna manera.

“Los cargos en sus casos surgieron únicamente después de que varios de mis opositores políticos en el Congreso los instigaron para atacarme y oponerse a mi elección”, subrayó Biden. “Ninguna persona razonable que analice los hechos en los casos de Hunter puede llegar a otra conclusión que no sea que Hunter fue señalado sólo porque es mi hijo.”

“Espero que los estadounidenses entiendan por qué un padre y un presidente tomarían esta decisión”, agregó Biden, afirmando que tomó la decisión durante el fin de semana. El presidente había pasado el feriado de Acción de Gracias con Hunter y su familia en Nantucket, Massachusetts, y tenía previsto partir hacia Angola más tarde ese domingo en lo que podría ser su último viaje al extranjero como presidente antes de dejar el cargo el 20 de enero de 2025.

Un tribunal federal de Delaware declaró culpable a Hunter Biden por tres delitos graves por la compra de un arma de fuego en 2018 cuando, según los fiscales, mintió en un formulario federal al afirmar que no era usuario ilegal ni adicto a las drogas.

En el caso de California, su juicio estaba previsto para septiembre, luego de ser acusado de no pagar al menos 1,4 millones de dólares en impuestos. Pero, sorpresivamente, acordó declararse culpable de cargos menores y graves horas después del inicio de la selección del jurado.

David Weiss, el fiscal federal en Delaware, designado al cargo por Trump y responsable de negociar el acuerdo de culpabilidad, fue nombrado posteriormente como fiscal especial por el secretario de Justicia Merrick Garland para tener mayor autonomía sobre el proceso contra el hijo del presidente.

Hunter Biden dijo que se declaraba culpable en ese caso para evitarle más dolor y vergüenza a su familia después de que el juicio por armas reveló detalles íntimos sobre su lucha contra una adicción al crack.

Los cargos por evasión fiscal conllevan una pena de hasta 17 años en prisión, mientras que en el otro juicio enfrentaba una sentencia de hasta 25 años de cárcel. Se tenía previsto, sin embargo, que debido a las pautas de sentencia federales la fiscalía pidiera una condena mucho menor, con la posibilidad de que evitara por completo la cárcel.

Las audiencias de sentencia estaban programadas para este mes en ambos casos, los cuales fueron presentados por el fiscal especial después de que un acuerdo de culpabilidad con la fiscalía que le habría evitado ir a prisión se vino abajo. El pacto original establecía que Hunter debía declararse culpable de un cargo menor en materia fiscal y habría evitado el proceso en el caso por armas de fuego siempre que se mantuviera libre de problemas durante dos años.

Pero el acuerdo se vino abajo el año pasado cuando el juez planteó sus inquietudes sobre lo inusual del pacto. Posteriormente fue procesado en ambos casos.

Biden está lejos de ser el primer el presidente que emplea su poder de indulto para beneficiar a sus allegados.

En sus últimas semanas en el cargo, Trump indultó a Charles Kushner, el padre de su yerno, Jared Kushner, y a varios aliados condenados en la pesquisa del fiscal especial Robert Mueller sobre Rusia. Trump anunció el fin de semana sus planes de nominar a Kushner padre como enviado de Estados Unidos a Francia en su próximo gobierno.

Trump, que ha prometido una reforma drástica del Departamento de Justicia y nombrar a personas leales después de verse procesado por su papel en los esfuerzos por revertir las elecciones presidenciales de 2020, dijo el domingo en una publicación en redes sociales que el indulto a Hunter Biden era un “abuso y una injusticia”.

“¿Incluye el indulto que da Joe a Hunter a los rehenes del 6 de enero que llevan años encarcelados?”, preguntó Trump en alusión a los condenados por la violenta insurrección del 6 de enero de 2021 en el Capitolio estadounidense realizada por sus seguidores.

Por su parte, el hijo del presidente dijo en un comunicado enviado por correo electrónico que nunca dará por sentado la indulgencia que se le ha concedido y se comprometió a dedicar la vida que ha reconstruido “a ayudar a aquellos que siguen enfermos y sufren”.

“He admitido y asumido la responsabilidad de los errores que cometí durante los días más oscuros de mi adicción, errores que han sido explotados para humillar y avergonzar públicamente a mí y a mi familia con fines políticos, dijo Hunter Biden.

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