Loni Willison fue una modelo muy popular en la primera década del 2000, llegando a estar frecuentemente en las portadas de revistas fitness estadounidenses como Glam Fit y Flavor, pero ahora vive en las calles.
Su declive empezó poco después de casarse con Jeremy Jackson, quien en los noventa saltó a la fama por su papel de Hobie Buchannon, hijo de Mitch Buchannon en la serie “Baywatch”.
El exactor juvenil desde los 19 años empezó a consumir metanfetaminas y desde entonces ha entrado y salido de centros de rehabilitación, y hasta pagó una condena en la cárcel de 90 por posesión y distribución de estupefacientes.
Jeremy Jackson condenó a la miseria a Loni Willison
En el 2012, Jeremy Jackson y Loni Willison contrajeron matrimonio. Para ese tiempo, como ya no tenía tanto trabajo en el modelaje, fue asistente de un cirujano plástico.
Ante los medios la pareja aparentaba estar feliz, hasta que, tras separarse en 2015, la exmodelo reveló que durante todo el tiempo que estuvieron juntos, recibió graves palizas de su exesposo.
Como Jeremy Jackson se excedía consumiendo alcohol y drogas, no se medía en su maltrato y llegó a romperle varias costillas, además que le dejó un montón de cicatrices en el rostro y cuerpo que imposibilitaron a Loni Willison continuar con su carrera como modelo.
Por si fuera poco, el médico para el que trabajaba la despidió y a los 31 años de edad, sin muchos recursos, tuvo que alquilar un pequeño lugar donde también fue horriblemente maltratada.
En una entrevista que Loni Willison le concedió a Daily Mail, contó que Jeremy Jackson llegó a electrocutarla durante todo un año, desde entonces es sensible a ciertos metales y a la electricidad, por lo que no puede vivir en espacios cerrados.
Así acabó viviendo en la calle y a pesar de contar con una extensa familia, no quiere recibir ayuda de nadie porque asegura que está bien, aunque se sabe que es adicta a las drogas. La última vez que la vieron, estaba hurgando la basura y se llevó un enjuague bucal.