En la actualidad, Ana de Armas ha destacado en Hollywood teniendo una carrera sobresaliente, aunque detrás de su éxito hay un gran camino lleno de esfuerzo y obstáculos.
A continuación, te contamos cómo fue que la actriz logró obtener fama mundial.
Así fue la vida de Ana de Armas en Cuba
La actriz nació el 30 de abril de 1988, en Cuba, país en el que tuvo una infancia llena de carencias, a pesar de pertenecer a una familia de intelectuales de origen español.
En una entrevista para “Mujer Hoy”, la actriz contó cómo fueron esos momentos tan complicados que vivió.
“Se iba la luz. Comíamos huevo frito, arroz y, alguna vez, pollo”, relató. También reveló que tenía que usar la ropa de sus hermanos, pues su familia no contaba con los suficientes recursos.
Ana relató que su papá tuvo varios trabajos, mientras que su mamá siempre se desempeñó en el mismo ámbito.
“Desde teniente de alcalde de un pueblo, a director de un banco, pasando por profesor, director de escuela... y mi madre siempre se ha dedicado a los recursos humanos. Son gente muy preparada y muy culta”, agregó.
Salió de Cuba con 200 dólares
Desde pequeña, la artista se dio cuenta que la actuación era su verdadera vocación, por lo que anhelaba salir de su país para cumplir sus sueños.
Cuando tenía 16 años debutó en la película “Una Rosa de Francia”, y fue el momento en el que decidió hacer sus maletas para irse de su nación, aunque sólo tenía 200 dólares en los bolsillos.
En aquel instante sólo le dijo a su madre: “cuando me quede sin dinero, volveré”.
Ana decidió irse a España, pues tenía familia ahí; además de que pensó que sería más fácil.
Su primer papel importante fue en la serie “El Internado”, y durante su estancia en aquel país conoció el amor con el actor Marc Clotel.
Cuando se divorció de él, De Armas decidió mudarse a Los Ángeles para comenzar de nuevo, así fue como llegó a Hollywood y se volvió una estrella internacional.