El actor Tom Felton, que saltó a la fama en su papel de Draco Malfoy en la saga de Harry Potter, publicó su autobiografía llamada Beyond the Wand: The Magic and Mayhem of Growing Up a Wizard.
Las verdades que dijo en su libro
En su libro no solo cuenta del “cariño secreto” que tiene hacia Emma Watson, sino que también revela los momentos más difíciles de su vida cuando era alcohólico. Explica que el alcohol era su mayor refugio cuando intentaba escapar de la situación mental en la que estaba. Este mismo problema lo llevó tres veces a ingresar a rehabilitación.
Su abogado lo alentó
Tom Felton cuenta que en aquel momento su actual pareja organizó una reunión con sus padres para tratar de convencerlo de buscar ayuda, pero no sirvió de nada. Sin embargo, las palabras de su abogado fue lo que lo animaron a ir a rehabilitación:
“Mi abogado a quien apenas había visto en persona me habló de una manera muy honesta: ‘No te conozco muy bien, pero pareces un buen tipo. Solo quiero decirte que esta es la intervención número 17 que hago en mi carrera por este motivo. Once de esas personas están muertas. No seas el número doce’”.
Primera rehabilitación
Con estas fuertes palabras, Felton decidió ingresar en un centro en Malibú en el que permaneció solo 24 horas. Su segunda vez salió expulsado por mala conducta y, aunque consiguió estar estable, años después recayó.
La tercera vez, para él, fue la “decisión más difícil que tuvo que tomar”, pero se alegra de haber tomado la decisión correcta. Admite que el alcohol siempre fue la salida más fácil.
“Del mismo modo que todos experimentamos problemas físicos en nuestra vida, también los tenemos mentales. No hay que avergonzarse por ello. No es un signo de debilidad”, escribió en su libro.