Asperger: El poder está en la diferencia

Con Greta Thunberg, se volvió a hablar de una neurodivergencia de la que todavía se tienen muchos prejuicios.

La activista ambientalista Greta Thunberg generó múltiples y apasionadas reacciones por sus declaraciones y sus acciones en su paso por Estados Unidos. Pero una de las más predecibles (por su bajeza, claro), fue hacer hincapie en que por el síndrome de Asperger no estaba en sus cabales.

La niña solo pudo contestar de manera tajante: “Cuando los que odian persiguen por tu apariencia y diferencias, significa que han perdido el rumbo. ¡Y entonces sabes que estás ganando! Tengo Asperger y eso significa que a veces soy un poco diferente de la norma. Y, en ciertas circunstancias, ser diferente es un superpoder”, explicó en Twitter. Asimismo, tuvo que hace énfasis en que no se esconde tras él, sino que, como bien le mostraron sus haters, aún se ve como una enfermedad.

Esto generó una campaña viral con el hashtag #aspiepower, donde se ve que tener este diagnóstico no es una limitante y que este don (fue diagnosticada con el síndrome de Asperger a sus 12 años) le ha permitido ser determinante en su lucha contra el cambio climático. 

¿Qué es el síndrome de Asperger? 

“El término Síndrome de Asperger entró en la Biblia de la psiquiatría en 1994 (Manual Diagnóstico y Estadístico de Enfermedades Mentales, DSM-5) ,y esencialmente se caracterizó por describir un deterioro en la comunicación e interacción social cualitativa, junto con comportamientos que eran rígidos, repetitivos, rituales y rutinarios. En las personas con el síndrome, no se vio que hubo retraso en el habla y lenguaje, y otros adquirieron entonaciones  y tonos extraños”, explica a Metro Elaine Nicholson, Jefe y Consultora de la organización benéfica Acción por Asperger, basada en Inglaterra. Sin embargo, hay condiciones heterogéneas dentro de este mismo espectro.

También es definido como un trastorno de comportamiento que impide comunicarse y socializar correctamente, según el diagnóstico primario y esto incluye la expresión de emociones hacia el exterior y con otros. También algunas personas con el síndrome destacan por tener algunas habilidades superiores a la media y tener intereses específicos que dominan tempranamente. El tratamiento es psicológico y se entrena a la persona con este síndrome para mejorar sus habilidades de comunicación y socialización. 

Ahora bien, muchas personas llegan a desarrollar, en la vida adulta, profesiones como cualquier otra. Y el Asperger está lejos de ser una enfermedad incapacitante y eso es lo que varias fundaciones y organizaciones tratan de hacer ver, sobre todo en una cultura que estigmatiza las neurodivergencias. “Hay muchas creencias alrededor. Que son todos como Rain Man, que solo se aíslan o se educan en casa, que son víctimas. O que son todos súper inteligentes, como Steve Jobs y Bill Gates. Pero a lo largo de los años, hemos visto que ni un solo individuo autista es igual a otro. No son un grupo homogéneo y una categoría no sirve para todos. Al igual que en la población neurológicamente típica, la comunidad autista, de la cual las estadísticas actuales representan el 1% de la población mundial, es un grupo heterogéneo que merece ser entendido por aquellos con quienes tienen que conectarse a través de sus vidas: educadores, empleadores, hermanos y socios. La conciencia del autismo en todo el mundo es clave para su felicidad futura”, explica a Metro Elaine Nicholson. 

“Ahora bien, la persona que tiene Asperger jamás te dirá que tiene un desorden”, aclara. “Te dirá que esa es su identidad”.

P y R 

Elaine Nicholson, MBE 

Jefa Ejecutiva/Consultora 

Action for Asperger’s Registered Charity, Londres 

¿Cuál es la diferencia entre el Síndrome de Asperger y otros síndromes? 

Aquellas personas diagnosticadas con Autismo de Alto Funcionamiento mostraron las mismas características que aquellos con el Síndrome de Asperger, pero probablemente sufrieron un retraso significativo en el lenguaje: la mujer autista más famosa del mundo, Temple Grandin, fue así una vez, ella no habló hasta casi los 5 años de edad. Durante este tiempo también hubo una variante del autismo llamada PDD-NOS (trastorno generalizado del desarrollo, no especificado de otra manera), y este descriptor puede haberse dado luego de que se vio que un individuo mostró un impedimento en la comunicación social y la interacción social, pero que tal vez no mostró ciertos comportamientos estereotipados alrededor del miedo al cambio y la rigidez, por ejemplo.

Durante este tiempo también se incluyó el trastorno de Rhett, que es un trastorno cerebral genético comúnmente visto en mujeres e incluye problemas con el lenguaje, la coordinación y los movimientos repetitivos.

En el otro extremo del espectro tenemos sabios; personas con un talento excepcional para el recuerdo, como el personaje interpretado por Dustin Hoffman en la película Rain Man. En el extremo inferior del espectro autista tenemos «Kanner’s»: Leo Kanner era un pediatra de Europa del Este, quien, mientras trabajaba en un Hospital de Chicago en 1943, observó que algunos de los niños bajo su cuidado sufrían deficiencias en el habla y el lenguaje; no podían interactuar bien, y preferían cambiar la rutina y los rituales, PERO estos niños eran de inteligencia promedio a inferior a la media, a diferencia de los niños que Hans Asperger descubrió en Viena en 1944 que sufrían los mismos déficits, pero que tenían una inteligencia promedio a superior a la media.

¿Pueden las personas con Asperger relacionarse normalmente? 

Claro que pueden. Son las personas que no tienen Asperger quienes tienen que hacer algunos ajustes para convivir y será más difícil si no los hacen. Si usted tiene un amigo o un conocido en su familia, impacta en todos los miembros de manera muy fuerte. Es muy común que los compañeros/parejas de quienes tienen Asperger puedan sufrir algún tipo de afección psicológica, por lo que es recomendable la terapia de pareja.

 

TE RECOMENDAMOS EN VIDEO 

Contenido Patrocinado

Lo Último