En Brasil un equipo científico se dio a la tarea de evaluar los daños que puedan ocasionar la soda azucarada, y para determinar los primeros resultados, alimentaron a un grupo de ratas con únicamente esa bebida durante 2 meses.
Los resultados determinaron que los refrescos a base de cola inducen deterioro de la memoria a diferentes edades. Además que influyen en el aumento del marcador ROS en el hipocampo, el aumento de la peroxidación lipídica en el hipocampo y alteran la actividad de las enzimas oxidativas.
Esos resultados se suman a las afecciones de salud ya conocidas como diabetes, enfermedades cardíacas, caries dentales y complicaciones hepáticas, entre otras.
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Detalles del estudio
Para este estudio participó algunas universidades de Brasil, como Centro Universitario de Espirito Santo, Universidad Federal de Santa Catarina (UFSC) y Universidad Jesuita Ignatianum de Polonia.
Los científicos primero separaron a las ratas en tres grupos de edad: 2 meses, 8 meses y 14 meses de edad. Cada uno de esos grupos de edad se dividió en cohortes que bebían agua y que bebían cola y agua.
El laberinto de brazo radial y el laberinto en Y se utilizaron para evaluar la memoria espacial, el campo abierto para evaluar la memoria de habituación y la evitación inhibitoria para evaluar la memoria aversiva. Las pruebas de comportamiento comenzaron en el día 57 y terminaron en el día 67 del tratamiento. Al día 68, las ratas fueron asesinadas; la corteza frontal y el hipocampo se diseccionaron para el análisis de las enzimas antioxidantes catalasa (CAT) y superóxido dismutasa (SOD); y los marcadores oxidativos de sustancias reactivas al ácido tiobarbitúrico (TBARS) y dicloro-dihidro-fluoresceína diacetato (DCFH) se midieron en el hipocampo.
“La ingesta de refrescos a base de cola causó deterioro de la memoria en el laberinto del brazo radial, la tarea del laberinto en Y y el campo abierto en la rata de 2 y 8 meses de edad, pero no en la de 14 meses de edad. No hubo diferencias entre los grupos en la prueba de evitación inhibitoria. En la corteza frontal, la ingesta de refrescos redujo la actividad catiana en las ratas de 8 meses de edad y la actividad de SOD en las ratas de 8 y 14 meses de edad”, señala el estudio publicado en Science Direct.