En un hecho sin precedentes, miles de palestinos han marchado en estos últimos días en la Franja de Gaza para protestar contra la guerra y muchos también han coreado consignas contra Hamás, en una inusual muestra de enojo público contra el grupo militante.
Las protestas, centradas principalmente en el norte de Gaza, piden el fin de los 17 meses de combates mortales con Israel que han hecho la vida en Gaza insoportable.
Pero los manifestantes también dirigieron críticas inusualmente directas y públicas contra Hamás, que en el pasado ha reprimido violentamente la disidencia en Gaza, un territorio que aún gobierna varios meses después del inicio de la guerra con Israel.
¿Dónde se registraron las protestas?
En la ciudad de Beit Lahiya, donde se realizaron protestas martes y miércoles, unas 3 mil personas se manifestaron, muchas coreando: “El pueblo quiere la caída de Hamás”. En el barrio golpeado de Shijaiyah, en Ciudad de Gaza, decenas de hombres gritaban: “¡Fuera, fuera, fuera! ¡Hamás, vete!”.
“Nuestros hijos han sido asesinados. Nuestras casas destruidas”, dijo Abed Radwan, quien afirmó haberse unido a la protesta en Beit Lahiya “contra la guerra, contra Hamás, contra las facciones (políticas palestinas), contra Israel y contra el silencio del mundo”.
Ammar Hassan, quien participó en una protesta el martes, dijo que comenzó como una manifestación contra la guerra con unas pocas decenas de personas, pero pronto creció a más de 2.000, muchos de ellos coreando contra Hamás.
“Es el único actor sobre el que podemos tener algún efecto”, dijo. “Las protestas no detendrán la ocupación (israelí), pero sí pueden influir sobre Hamás”.
El grupo militante ha reprimido violentamente protestas anteriores, pero esta vez no se vio una intervención directa, quizás porque Hamás mantiene un perfil bajo desde que Israel reanudó la guerra contra ellos.
El alto funcionario de Hamás, Bassem Naim, escribió en Facebook que la gente tenía derecho a protestar, pero que su enfoque debía ser el “agresor criminal”, Israel.
La protesta es “contra todo el mundo”
Ancianos de Beit Lahiya expresaron apoyo a las protestas contra la renovada ofensiva israelí y el endurecimiento del bloqueo que impide la entrada de suministros a Gaza. En su declaración afirmaron que la comunidad apoya totalmente la resistencia armada contra Israel.
“La protesta no era sobre política. Era sobre las vidas de las personas”, dijo Mohammed Abu Saker, padre de tres hijos del cercano pueblo de Beit Hanoun, quien se unió a la manifestación del martes.
“Queremos detener la matanza y el desplazamiento, cueste lo que cueste. No podemos detener que Israel nos mate, pero sí podemos presionar a Hamás para que haga concesiones”, afirmó.
Una protesta similar ocurrió el martes en Jabaliya, una zona también muy destruida, según testigos.
Un manifestante en Jabaliya, que habló bajo condición de anonimato por temor a represalias, dijo que corearon consignas contra Israel, Hamás, la Autoridad Palestina respaldada por Occidente y los mediadores árabes. Dijo que no había fuerzas de seguridad de Hamás en la protesta, pero se produjeron enfrentamientos entre simpatizantes y opositores del grupo.
El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, instó a los palestinos a unirse a las protestas. “Ustedes también deben exigir la eliminación de Hamás de Gaza y la liberación inmediata de todos los rehenes israelíes. Esa es la única manera de detener la guerra”, afirmó.
Un palestino de 19 años, que también habló bajo anonimato por temor a represalias, dijo que su familia ha sido desplazada múltiples veces desde que su casa fue destruida. “La gente está enojada con todo el mundo”, incluidos Estados Unidos, Israel y Hamás, dijo y agregó: “Queremos que Hamás resuelva esta situación, libere a los rehenes y ponga fin a todo esto”.
¿Desde cuándo Hamás domina Gaza?
Hamás ganó por amplia mayoría las últimas elecciones palestinas, celebradas en 2006. Al año siguiente tomó el poder en Gaza de la Autoridad Nacional Palestina, respaldada por Occidente y dominada por el movimiento laico Fatah, tras meses de enfrentamientos internos y una semana de intensos combates callejeros.
Organizaciones de derechos humanos afirman que tanto la Autoridad Nacional Palestina como Hamás reprimen violentamente la disidencia, sofocando protestas en las zonas que controlan y encarcelando y torturando a críticos.
Las protestas estallaron una semana después de que Israel rompiera el alto al fuego con Hamás al lanzar una ola sorpresa de ataques que han matado a cientos de personas. A comienzos de este mes, Israel detuvo la entrega de alimentos, combustible, medicinas y ayuda humanitaria a los aproximadamente 2 millones de palestinos en Gaza.
Israel ha prometido intensificar la guerra hasta que Hamás libere a los 59 rehenes que aún mantiene, 24 de los cuales se cree que siguen vivos. También exige que el grupo ceda el poder, se desarme y exilie a sus líderes.