En medio de la reactivación de la Guerra en Gaza, Israel vive una severa crisis política, legal y social que involucra al gobierno de Benjamin Netanyahu, al servicio de seguridad interna y al poder judicial.
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El jueves por la noche, el gabinete aprobó por unanimidad la moción de Netanyahu para despedir a Ronen Bar, jefe del servicio de seguridad interna, o Shin Bet.
Sin embargo, la Corte Suprema de Israel intervino el viernes y ordenó la suspensión temporal del despido de Bar hasta que se pueda examinar su apelación.
El máximo tribunal dijo que su puso como plazo máximo el 8 de abril para escuchar la apelación. La oficina de Netanyahu había dicho que el despido de Bar se haría efectivo el 10 de abril, pero que podría ocurrir antes si se encontraba un reemplazo.
¿Por qué están enfrentados el gobierno de Israel y el poder judicial?
El anuncio de Netanyahu de que buscaría despedir al director del Shin Bet, se produjo mientras el servicio de seguridad investiga los vínculos entre asesores de Netanyahu y Qatar.
La fiscal general Gali Baharav-Miara, a quien el gobierno también ha intentado remover, declaró el domingo que Netanyahu necesita aclarar la base legal para su decisión antes de tomar cualquier acción, señalando que “el papel del Shin Bet no es servir la confianza personal del primer ministro”.
Luego Netanyahu respondió con una carta de advertencia a la fiscal general israelí, diciendo que ella no tiene autoridad para intervenir en el asunto. La disputa añade preocupaciones crecientes sobre el equilibrio de poderes en el gobierno de Israel.
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Después de la orden de la Corte Suprema, la fiscal general Baharav-Miara ordenó al primer ministro que tiene prohibido nombrar un nuevo jefe del Shin Bet, o incluso realizar entrevistas para el puesto.
El conflicto podría transformarse en una crisis social, ya que de acuerdo a Times of Israel, el principal sindicato y el foro empresarial israelí amenazaron con una huelga nacional si el gobierno no acataba la orden judicial.
¿Cuál fue la respuesta de Netanyahu?
A través de la red social X, el primer ministro de Israel desafió la orden de la fiscal general y dijo que “el Estado de Israel es un estado de derecho y, según la ley, es el Gobierno israelí decide quién será el jefe del Shin Bet”.
Además, Netanyahu aseguró que Israel no está en riesgo de una una “guerra civil”, en relación a las palabras del respetado ex presidente de la Corte Suprema Aharon Barak, quien expresó su temor a que el país este en camino de un fuerte conflicto debido a los intentos del gobierno de remover a Bar y también a la fiscal Baharav-Miara.
