El vicepresidente JD Vance no estuvo solo en su toma de protesta el pasado lunes 20 de enero en Washington, D.C. Junto a su esposa, Usha Vance, y sus tres hijos, protagonizó un momento familiar que rápidamente se robó la atención del público y las cámaras. Fue la más pequeña de la familia, Mirabel Vance, de tan solo tres años, quien acaparó las miradas.
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Mientras su padre juraba como el 50° vicepresidente de los Estados Unidos en la Rotonda del Capitolio, Mirabel, en brazos de su madre, fue captada chupándose el pulgar. La inocente escena desató una ola de comentarios en redes sociales, donde muchos destacaron la naturalidad y ternura de la niña.
Los hijos de JD Vance llamaron la atención de todos en las redes y cautivaron al país
Sobre la presencia de los menores, un usuario escribió: “Creo que todo el país puede estar de acuerdo en que Mirabel Vance chupándose el pulgar es absolutamente adorable”. Los hermanos mayores de Mirabel, Ewan y Vivek, también estuvieron presentes en el histórico momento.
Vestidos con trajes y corbatas azules a juego, los chicos acompañaron a sus padres con una impecable conducta, destacando por su elegancia y sencillez. Usha Vance, quien hizo historia al convertirse en la primera segunda dama de ascendencia india en los Estados Unidos, también brilló con luz propia.
La abogada lució un elegante abrigo de cachemira rosa diseñado por Oscar de la Renta, acompañado de un vestido a juego, resaltando su estilo sofisticado. La familia Vance, que ha mantenido un perfil relativamente bajo, parece estar lista para afrontar los retos de la atención pública que conlleva su nueva posición.
La familia Vance se gana el corazón de miles de estadounidenses
La historia de la pareja simboliza el espíritu del sueño americano. Usha, hija de inmigrantes indios y criada en una comunidad de clase media en San Diego, ha hablado en repetidas ocasiones del esfuerzo y dedicación que define a su esposo. Por su parte, JD Vance, quien creció en un entorno humilde, ha atribuido su éxito al apoyo de su familia y a su fe en el futuro del país.
Con momentos como el protagonizado por sus hijos, la familia Vance no solo gana visibilidad, sino también el cariño del público, reflejando una imagen de cercanía en un contexto político muchas veces distante.