PARÍS (AP) — Los Juegos Olímpicos del 2024 están en estado de alerta, luego que la red francesa de trenes de alta velocidad (TGV) fue golpeada el viernes con numerosos actos “criminales” de vandalismo, incluidos incendios intencionales, que paralizaron los desplazamientos a París desde el resto de Francia y Europa apenas unas horas antes de la gran Ceremonia de Inauguración en el río Sena de la capital.
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Los agresores actuaron de manera coordinada y sus ataques fueron estratégicos sobre las rutas principales desde el norte, este y oeste hacia París.
Las autoridades abrieron una investigación sobre las “acciones criminales” que podían suponer penas de hasta 15 y 20 años de prisión, aunque señalaron que no había una conexión directa con la justa olímpica.
Caos en las estaciones de trenes
Los ataques generaron incertidumbre y retrasos en el sistema ferroviario, vital dentro del transporte de Francia, con cientos de miles de personas varadas que intentaban visitar París por vacaciones o los Juegos. Los incidentes afectaron especialmente a la gran estación de Montparnasse, en París.
Valerie Pecresse, presidenta del consejo regional de la región de París, dijo que “250.000 viajeros se verán afectados hoy en todas estas líneas”. Había planes de sustitución en marcha, pero Pecresse recomendó a los viajeros que “no vayan a las estaciones”.
Entre los afectados hay deportistas olímpicos que iban a la Inauguración.
Dos de cuatro trenes que trasladaban a deportistas de los Juegos a París en la ruta Atlantique de alta velocidad en el oeste, fueron frenados previo a la ceremonia de apertura, dijo un funcionario del operador ferroviario SNCF.
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Entre los viajeros afectados había dos competidores alemanes de salto ecuestre, que iban en un tren a París para participar en la Ceremonia de Apertura pero tuvieron que regresar a Bélgica por los cortes y ahora se perderían el evento, según dijo la agencia alemana DPA. “Ya no había posibilidades de llegar a tiempo”, dijo el jinete Philipp Weishaupt, que viajaba con su compañero de equipo Christian Kukuk.
Reacciones de las autoridades por el ataque
El primer ministro saliente de Francia, Gabriel Attal, dijo que los sabotajes e incendios provocados tenían “un objetivo claro: bloquear la red de tren de alta velocidad”.
Attal, indicó en la red social X que se había movilizado a los servicios de inteligencia franceses para encontrar a los responsables y describió los incidentes de “actos de sabotaje”, que fueron “preparados y coordinados”.
Se vio gente huyendo de lugares donde se produjeron varios incendios y se habían encontrado dispositivos incendiarios, dijo el ministro de Transportes, Patrice Vergriet, en declaraciones a la televisora BFM.
Los puntos atacados fueron intersecciones de vías para duplicar el impacto, indicó la compañía ferroviaria estatal SNCF.
También el viernes, el aeropuerto francés de Basel-Mulhouse en la frontera con Alemania y Suiza fue evacuado por la mañana y seguía cerrado de forma temporal “por motivos de seguridad”, según el aeropuerto. No estaba claro si había relacionado con los ataques ferroviarios.
En horas de la tardes, algunos trenes volvieron a circular con pasajeros.
