Los legisladores de Louisiana aprobaron un proyecto de ley que añadiría dos medicamentos utilizados habitualmente para provocar un aborto a la lista estatal de sustancias peligrosas controladas, lo que convierte la posesión de estos fármacos sin una receta válida en un delito castigado con una multa, cárcel o ambas.
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La medida, que ha suscitado el apoyo de grupos contra el aborto y la alarma de profesionales de la medicina y defensores de los derechos reproductivos, añadiría los medicamentos mifepristona y misoprostol a la Lista IV de la Ley Uniforme de Sustancias Peligrosas Controladas del estado.
El aborto ilegal
El aborto –tanto médico como quirúrgico– es ilegal en Louisiana, por lo que ya es ilegal recetar estos medicamentos para interrumpir un embarazo, salvo en circunstancias muy específicas.
Los abortos con medicamentos representaron el 63% de todos los abortos en 2023, según el grupo de expertos en derechos reproductivos Guttmacher Institute.
El proyecto de ley fue aprobado en una votación en la Cámara de Representantes del estado, controlada por el Partido Republicano, por 64 votos a favor y 29 en contra.
Próxima ley
La medida volverá ahora al Senado y, si es aprobada, será enviada al gobernador para que la convierta en ley.
La legislación castigaría con hasta cinco años de prisión la posesión de estos medicamentos sin una receta válida o una orden de un profesional médico. Las embarazadas que obtuvieran los medicamentos para su propio consumo no estarían sujetas a enjuiciamiento, según la legislación.
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¿Qué dicen los profesionales de la salud?
Los profesionales de la salud se han manifestado en contra de la medida, al alegar que los medicamentos tienen usos importantes más allá del aborto, como ayuda en el parto, el tratamiento de abortos espontáneos y la prevención de úlceras gastrointestinales.
En la Lista IV se encuentran algunos narcóticos; medicamentos de la categoría de los depresores, como Xanax y Valium; relajantes musculares; somníferos; y estimulantes que pueden ser utilizados para tratar el Trastorno por Déicit de Atención e Hiperactividad (TDAH) y la pérdida de peso.
El proyecto de ley, Senate Bill 276, también tipificaría como delito el “aborto criminal coaccionado mediante fraude”, que prohibiría a alguien utilizar a sabiendas los medicamentos para provocar o intentar provocar un aborto sin el consentimiento de la embarazada. Ello se castigaría con hasta 10 años, o hasta 20 años, si la embarazada tuviera tres o más meses de embarazo.
