La lucha de poderes se mantiene en la frontera de Texas con México, luego de que la Corte Suprema emitiera un fallo que permite al gobierno de Joe Biden cortar los alambres de púas que Greg Abbott, gobernador de Texas, colocó en esta línea limítrofe para frenar la inmigración ilegal.
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El regente estadal sigue colocando el cercado, pese a la orden judicial, confrontando directamente al mandatario nacional estadounidense.
“La Administración Biden realmente ha abdicado de su responsabilidad de hacer cumplir las leyes de inmigración vigentes. Texas tiene el derecho constitucional de defenderse y protegerse. Seguiremos manteniendo la línea”, aseguró Abbott este jueves en su cuenta X.
El gobernador cuenta el apoyo de los republicanos en la Cámara, entre ellos, el de Mike Collins, quien según New York Post, presentó una proyecto de ley que prohibirá que Biden corte los alambres de púas o que quite cualquier barrera que la Gobernación de Texas coloque en su frontera sur.
El citado medio refiere que la legislación prohíbe “eliminar o alterar cualquier barrera construida por el estado e instalada para mitigar la inmigración ilegal”.
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“El presidente Biden está ayudando e instigando a los extranjeros ilegales que pululan por nuestra frontera y asaltan los recursos de nuestro país ¿Por qué si no intentaría impedir que el estado de Texas los devuelva a México?, expresó Collins en un comunicado.
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Piden apoyo del Congreso a Texas
Mike Collins manifestó que en vista de que la Corte Suprema “se pone del lado de las políticas America Last de la administración Biden, el Congreso debe apoyar al gobernador Greg Abbott en su lucha por la soberanía de su estado y nuestra nación”.
Mientras tanto, la Guardia Nacional de Texas sigue colocando alambres de púas en la frontera con México. La orilla del río Bravo y la zona terrestre están rodeadas por este cercado, impidiendo el acceso a los inmigrantes ilegales.
Hasta el momento, no hay reportes de que la Patrulla Fronteriza esté quitando los alambres tras el fallo de la Corte Suprema de que el gobierno de Biden los puede quitar.
El gobernador Abbott se muestra firme en sus acciones, alegando que está defendiendo a su estado.
