Con un margen de 5-4, la Corte Suprema de Estados Unidos dio luz verde al gobierno del presidente Joe Biden para cortar los alambres de púas en la frontera entre Texas y México. El fallo judicial va contra la medida del gobernador Greg Abbott, quien aseguró que “seguirá luchando” por la seguridad de su estado.
PUBLICIDAD
Biden y Abbott tienen meses en disputa legal por los alambres de púas en esta zona fronteriza, que se ha convertido en un paso histórico de miles de migrantes. El mandatario estadounidense reforzó su solicitud del retiro del cerco, después de la muerte de tres migrantes en el Río Grande.
Aunque se trata de un paso ilegal, la línea limítrofe con el cerco de púas pone en el tapete los derechos humanos de los inmigrantes, principalmente el derecho a la vida, pues el bloqueo los pone en riesgo de muerte. Agentes federales han tratado de salvar a los migrantes, pero el cerco de púas se los ha impedido.
New York Post explicó que la decisión de la Corte Suprema anula la orden judicial de diciembre pasado que impedía a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) retirar el cercado de púas en Texas.
El citado medio informó que el fallo de la corte contó con los votos en contra de los jueces Samuel Alito, Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh y Clarence Thomas, aunque los jueces conservadores Coney Barrett y Roberts votaron a favor.
Gobernador de Texas reacciona
CNN informó que Greg Abbott, gobernador de Texas, se pronunció a través de un comunicado por medio de su secretario de prensa, quien dijo que “seguirá luchando para defender la propiedad del estado y su autoridad constitucional para asegurar la frontera”.
Expresó que “el Gobierno de Biden ha cortado repetidamente el alambre que Texas instaló para detener los cruces ilegales, abriendo las compuertas a los migrantes. La ausencia de alambre de púas y otras estrategias de disuasión alienta a los migrantes a realizar cruces inseguros e ilegales entre los puertos de entrada, al tiempo que hace que el trabajo de los soldados de la Guardia Nacional de Texas y del DPS sea más peligroso y difícil. Este caso está en curso y el gobernador Abbott seguirá luchando para defender la propiedad de Texas y su autoridad constitucional para asegurar la frontera”.
