El comer parchita tiene diversos beneficios, puesto que es una buena fuente de provitamina A, vitamina C y minerales como potasio, fósforo y magnesio. La vitamina A es esencial para la piel, el cabello, las mucosas, los huesos, la visión y el sistema inmunológico.
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Tiene un sabor cítrico, ácido y en ocasiones dulce que resulta ser una mezcla perfecta para el paladar. Además, es una fruta rica en nutrientes, vitaminas y antioxidantes.
“Según la publicación de la universidad, el extracto acuoso y sobre todo el etanólico de la pulpa de la parchita promueve la muerte de las células cancerígenas hasta en 60 % en el periodo inicial de la enfermedad”, publicó Semana.
¿Cómo cuida la piel el comer parchita?
El óleo de parchita es rico en ácidos grasos esenciales, que tienen el poder de calmar la piel, suavizando agresiones externas. De la pulpa, se consigue un extracto aromático.
“Los estudios también demostraron que, en su mayoría, los extractos de la fruta inducen a la necrosis, un mecanismo de muerte de las células dañinas. Debido a que es rica en antioxidantes y promueve la muerte de células dañinas, uno de los órganos beneficiados es la piel, ya que también se convierte en un excelente exfoliante natural, ayudando a remover las células muertas”, respectivamente.
Asimismo, el óleo de parchita tiene propiedades emolientes y de alta concentración de ácidos grasos esenciales, proporciona una sensación de frescura y tranquilidad por un activo presente en sus frutos y hojas, que funciona en el organismo como un suave calmante natural.
Otros beneficios
Ayuda a controlar el exceso de grasa, contiene potasio, fósforo y magnesio, minerales que ayudan a proteger la piel del rostro, ayuda a restaurar los daños ocasionados por el sol, es rica en hierro, un mineral importante para la formación y generación de hemoglobina y es rica en vitaminas A y C, por lo que resulta ser un poderoso antioxidante que previene el envejecimiento.
