Twitter entregó al fiscal especial al menos 32 mensajes directos de la cuenta del expresidente Donald Trump –@realDonaldTrump– enviados a principios de este año, como parte de la investigación federal por interferencia electoral, según documentos judiciales recientemente revelados.
Al buscar los mensajes, los fiscales argumentaron específicamente que Trump planteaba un riesgo de alterar las pruebas.
Documentos
Los documentos revelados arrojan nueva luz sobre el alcance de la investigación del fiscal especial sobre los intentos de Trump para revertir su derrota electoral de 2020. Gran parte de esa conducta se manifestó públicamente, incluso en la cuenta de Twitter de Trump, donde promovió afirmaciones falsas de fraude masivo e instó a funcionarios del Gobierno a interrumpir la certificación de los resultados.
Pero los investigadores también pudieron acceder a registros privados asociados con la cuenta, aunque no está claro exactamente qué rol tuvieron esos mensajes en la investigación.
Investigación
Los investigadores, que escribieron al Tribunal de Apelaciones del Circuito de la ciudad de Washington para defender una orden de confidencialidad que obtuvieron sobre la orden judicial para @realDonaldTrump.
Describieron cómo Trump había presionado a funcionarios estatales y federales después de las elecciones de 2020, tomado represalias contra personas que no hicieron lo que él dijo, pagado honorarios legales de los testigos de la investigación y menospreciado públicamente al fiscal principal de la Oficina del Fiscal especial.
Mensajes directos entregados
Los detalles de lo que obtuvieron los fiscales con una orden de registro emitida contra la plataforma de redes sociales fueron revelados en un escrito presentado en mayo bajo sellado al Tribunal de Apelaciones del Circuito de Estados Unidos en la ciudad de Washington.
Twitter –ahora conocida como X– apeló el fallo de un juez que sancionó a la empresa por la demora en la entrega de los registros de la cuenta de Trump.
La compañía se resistió a presentar los registros porque una orden aprobada por el tribunal le ordenó no revelar detalles sobre la orden sobre Trump. Planteó preocupaciones sobre la posibilidad de que el expresidente quisiera hacer valer el privilegio ejecutivo sobre algunos de los materiales de su cuenta.