La histórica ola de calor sin precedentes que provocó temperaturas superiores a los 100 grados Fahrenheit (38 centígrados) en la franja sur de Estados Unidos durante el fin de semana no dará tregua en los próximos días y se extenderá además a otras zonas del país.
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Cerca de un tercio de la población del país estuvo bajo avisos de calor extremo el domingo. Cientos de bomberos luchan contra los incendios en el sur de California. El Valle de la Muerte, a unas 130 millas al oeste de Las Vegas (Nevada), se aproximó a los 130 grados Fahrenheit (54 centígrados). Y varias ciudades de Texas, incluida la ciudad fronteriza de El Paso, cumplieron un mes con temperaturas superiores a los 100 grados Fahrenheit.
Extensión de Ola de calor
La ola de calor se extenderá el lunes hacia el noreste, prolongando hasta el próximo fin de semana las abrasadoras temperaturas, según el Servicio Meteorológico Nacional, que prevé niveles peligrosos en la costa más húmeda del Golfo de México y desde Florida al Sureste.
El Noreste se vio azotado por tormentas y lluvias torrenciales en el fin de semana, que causaron cinco muertos y obligaron a cancelar más de 1,320 vuelos. El humo de los incendios forestales en Canadá también se desplazó por las Grandes Llanuras y el Medio Oeste, provocando alertas sobre la calidad del aire de Montana a Ohio.
Verano extremo
El dramático fin de semana de intenso calor, tormentas y humo ilustraron un verano extremo que pone de relieve cómo la crisis climática está extendiendo las alertas por todo el país y aumentando las probabilidades de que las condiciones meteorológicas peligrosas y anómalas afecten a varias regiones a la vez.
El calor mata cada año a más personas en Estados Unidos que otros desastres meteorológicos. Estas olas pueden ser más peligrosas cuanto más se prolonguen, porque el estrés se acumula con el tiempo cuando las altas temperaturas no dan tregua a la gente.
Esta semana podría ser especialmente peligrosa en Phoenix (Arizona), que podría experimentar el periodo de siete días más caluroso de su historia, según el Servicio Meteorológico Nacional. La ciudad, junto con los suburbios circundantes del condado de Maricopa, registró 425 muertes asociadas al calor el año pasado.
El domingo fue el 17 día consecutivo en que la temperatura máxima de Phoenix alcanzó los 110 grados Fahrenheit (43º centígrados).