Los expertos recomiendan la ingesta de yogurt griego para mejorar la digestión de la lactosa en personas con mala digestión, además de ayudar a fortalecer la absorción de calcio. Igualmente, funciona para disminuir la incidencia, duración de los trastornos gastrointestinales en los niños.
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Los productos lácteos contienen diversas proteínas de alto valor biológico y digestibilidad, aparte de carbohidratos, grasas saludables, vitaminas y minerales, especialmente calcio y fósforo.
El ogurt griego es fuente de proteínas y colabora con la salud ósea e intestinal. Especialistas lo recomiendan para ayudar a superar algunas patologías como el helicobacter pylory o durante un tratamiento antibiótico.
¿Cómo se hace el yogurt griego?
Hacer yogur en casa es más fácil de lo que pueda parecer y, sin duda, merece la pena: que el resultado es increíble. Podemos hacerlo empleando cultivos o usando un yogur, que actuará como cultivo. Este último, por ser la opción más sencilla, será el proceso que usaremos en esta receta.
Primero, calienta la leche en un cazo junto con la nata hasta que llegue a 40 grados. Luego, retira del fuego y añade el yogur; mezcla y tapa, deja reposar en el horno o en un sitio cerrado y protegido de las corrientes de aire y la luz durante un mínimo de ocho horas. Pasado ese tiempo ya estará más espeso.
Posteriormente, coloca un bol con un colador encima y cubierto con una gasa y vierte el yogur griego. Deja que se cuele el suero unos 30 minutos. Cuanto más rato esté colando más espeso quedará, y ya para finalizar una vez colado guárdalo en un tarro grande o tarritos individuales en la nevera.
Beneficios
El yogur griego tiene unos cuatro gramos de proteínas. Tomar proteínas a diario es fundamental para la salud. Gracias a las proteínas podemos construir y reparar nuestros músculos y tejidos. El yogur griego tiene probióticos, microorganismos similares a las levaduras y las bacterias, pero que nos ayudan.
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Viven en nuestro sistema digestivo, un buen equilibrio de probióticos en nuestro cuerpo es fundamental para el buen funcionamiento del intestino.
El yogur griego tiene aproximadamente 150 mg de calcio y 0,38 mg de vitamina D. Comer alimentos con calcio y vitamina D funciona para el crecimiento en los niños y fortalece los huesos en los adultos.
