La detección de señales de radio es uno de los principales métodos que utilizan los científicos para buscar civilizaciones inteligentes en el espacio. Y este tipo de señales se emiten desde la Tierra cada vez con mayor potencia, lo que facilita que los extraterrestres encuentren nuestro planeta.
PUBLICIDAD
Investigadores de las universidades de Mauricio y Manchester utilizaron datos obtenidos por crowdsourced para simular las fugas de radio de las torres de telefonía móvil y predecir lo que una civilización alienígena podría detectar desde varias estrellas cercanas, incluida la estrella de Barnard, situada a seis años luz de la Tierra.
Ramiro Saide, becario del radioobservatorio Hat Creek del Instituto SETI y estudiante de máster en la Universidad de Mauricio, creó modelos que muestran la potencia de radio que recibirían estas civilizaciones a medida que la Tierra gira. Descubrió que una civilización extraterrestre con la tecnología adecuada podría detectar las señales emitidas desde nuestro planeta.
“La sensibilidad de sus instrumentos determinaría su capacidad para detectar la fuga de radio de la Tierra”, explicó Saide a Metro y añadió que se espera que las señales procedentes de nuestro planeta sean más intensas en el futuro.
El equipo de investigación sugiere que es probable que algunas civilizaciones técnicas extraterrestres dispongan de sistemas receptores mucho más sensibles que los nuestros, y la detectabilidad de nuestras señales aumentará sustancialmente a medida que vayamos disponiendo de sistemas de banda ancha mucho más potentes.
Saide afirmó que la proliferación de sistemas de comunicaciones móviles en todo el mundo es actualmente profunda. Aunque cada sistema por separado representa potencias radioeléctricas relativamente bajas, el espectro integrado de miles de millones de estos dispositivos es considerable.
“Creo que hay muchas posibilidades de que existan civilizaciones avanzadas ahí fuera, y algunas podrían ser capaces de observar la fuga de radio de origen humano procedente del planeta Tierra”.
— Nalini Heeralall-Issur, profesora asociada del Departamento de Física de la Universidad de Mauricio.
Los investigadores pretenden ahora ampliar su investigación para incluir otros contribuyentes a la huella de fuga radioeléctrica de la Tierra. El siguiente paso será tener en cuenta los potentes radares civiles y militares, los nuevos sistemas de radiodifusión digital, las redes Wi-Fi, los teléfonos móviles individuales y el enjambre de constelaciones de satélites que se están lanzando ahora a la órbita terrestre baja, como el sistema Starlink de Elon Musk.
PUBLICIDAD
“Las estimaciones actuales sugieren que tendremos más de cien mil satélites en órbita terrestre baja y más allá antes del final de la década. La Tierra ya es anómalamente brillante en la parte de radio del espectro; si la tendencia continúa, podríamos llegar a ser fácilmente detectables por cualquier civilización avanzada con la tecnología adecuada”, concluye Mike Garrett, profesor de astrofísica con gran interés en la Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre en la Universidad de Manchester.
Tres formas en que los humanos buscan extraterrestres
Escuchando
Breakthrough Listen es el mayor programa de investigación científica dedicado a buscar pruebas de vida inteligente más allá de la Tierra. Utilizando telescopios de todo el mundo, se centra en el millón de estrellas más cercanas con la esperanza de identificar cualquier señal de radio extraterrestre no natural.
Láseres espaciales
El Instituto SETI busca “láseres espaciales”. Algunos astrónomos plantean la hipótesis de que seres inteligentes podrían utilizar láseres masivos para comunicarse o incluso propulsar naves espaciales. Incluso aquí en la Tierra, estamos investigando la comunicación por láser y las velas de luz propulsadas por láser.
Misiones para buscar alienígenas minúsculos
En las próximas décadas, se espera que la humanidad explore las lunas de Júpiter y Saturno como nunca antes, con misiones en busca de rastros de vida básica.
Entrevista
Ramiro Saide, becario del Radio Observatorio Hat Creek del Instituto SETI y estudiante de la Universidad de Mauricio.
P: ¿Por qué son importantes las radiofrecuencias en la búsqueda de civilizaciones extraterrestres?
- Las ondas de radio son una forma de radiación electromagnética que puede viajar por el espacio. El polvo y el gas interestelares las afectan relativamente poco, lo que les permite recorrer grandes distancias sin sufrir una degradación significativa. Esto las convierte en un medio ideal para la comunicación a través de la inmensidad del espacio. Así, si una civilización extraterrestre transmite señales de forma intencionada o no, es más probable que las detectemos, dada la sensibilidad de nuestros radiotelescopios.
P: ¿Qué potencia tienen las radiofrecuencias terrestres?
- Las radiofrecuencias de la Tierra generadas por actividades humanas pueden variar en potencia, desde unos pocos vatios hasta cientos de miles de vatios, dependiendo de la aplicación. La detectabilidad de estas emisiones depende de factores como la intensidad de la señal, el ancho de banda, la distancia al receptor, la sensibilidad del receptor y la persistencia de la fuga. Las emisiones de radio de emisores potentes pueden detectarse incluso a distancias de cientos de años luz de la Tierra.
P: ¿Cómo podrían detectarse las señales de la Tierra?
- Si una civilización extraterrestre apunta un telescopio hacia la Tierra y lo sintoniza con la frecuencia de nuestras señales de radio, podría detectar nuestra presencia si dispone de instrumentos suficientemente sensibles.
P: ¿Espera que las radiofrecuencias de la Tierra sean cada vez más intensas?
- Por supuesto. Se espera que la tecnología móvil 5G represente más de la mitad del total de conexiones móviles en las regiones desarrolladas de Asia y Norteamérica en 2025. Los niveles de potencia de fuga aumentarán, pero los servicios también se ampliarán hacia frecuencias más altas; en concreto, la tecnología 5G operará en las siguientes bandas de frecuencia: banda baja (600, 800 y 900 MHz); banda media (2,5, 3,5 y 3,7 - 4,2 GHz); y banda alta (24, 26, 28, 37, 39, 42 y 47 GHz). Con el esperado auge de la tecnología móvil 5G y la expansión de los servicios a frecuencias más altas, es probable que las radiofrecuencias de la Tierra se vuelvan más fuertes. Además, el creciente despliegue de satélites con fines de comunicación contribuirá a aumentar las fugas de radio y la intensidad de la señal.