Una de las patologías más recurrentes es la diabetes, tanto en Estados Unidos como en otros países. De acuerdo con estudios y diversos científicos, cada día aumentan con velocidad los casos e incrementa la preocupación.
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“Es un diagnóstico cada vez más frecuente. Entre otras razones por que ahora, aunque hay sub registro, es más fácil detectarla y tratarla, por lo menos unos de cada diez personas padecen esta enfermedad crónica, que, básicamente, afecta la forma en que el cuerpo convierte los alimentos en energía”, expresó el reporte del Ministerio de Salud y Protección Social.
En este caso, dicha enfermedad se comunica a través de lo visible; es decir, a través de las uñas, cabello, piel o hasta emociones y puede enviar alertas de irregularidad.
“El pie diabético aparece cuando existen niveles inadecuados de glucosa en sangre y otros factores que concurren con frecuencia en personas con diabetes (hipertensión arterial, hipercolesterolemia)”, señaló el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas de Estados Unidos (NIH).
Pies, peligros y diabetes
Según La Clínica Universidad Navarra (CUN), “Los pacientes con esta patología tienen varios riesgos. Uno de ellos es la disminución de la sensibilidad y la mala circulación del pie y que se puede originar de la formación de una ulcera que en algunos casos son sumamente graves y producto de una posible amputación”.
Hormigueos y calambres, ausencia de sensibilidad, aparición de ulceras en la piel del pie, son algunos síntomas más frecuentes que presenta un paciente con pie diabético, generalmente.
El director del Departamento de Endocrinología y Nutrición, Javier Escalada San Martín, declaró: “Si un paciente diabético observa una úlcera en su pie debe acudir inmediatamente al especialista, tanto para curarla lo antes posible, como para descubrir la causa de su origen”, esto con la finalidad de poder diseñar un tratamiento único y especializado.
