Las autoridades no tendrán piedad con especialistas del área de la salud que se atrevan a hacer abortos en Texas. En el marco de la nueva normativa en contra de la interrupción del embarazo, que empezó a regir el jueves pasado, quien decida desobedecer podrá enfrentar multas de $100,000 y hasta cadena perpetua.
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La directora ejecutiva de Planned Parenthood Texas Votes, Dyana Limon-Mercado, habló al respecto: “Está claro que con la prohibición al aborto el punto de esta nueva ley es uno: la crueldad. Es la crueldad hacia los doctores, que pueden ser llevados a prisión de por vida por brindar atención. Es la crueldad hacia las pacientes que experimentan pérdidas involuntarias y complicaciones en el embarazo y a quienes ahora se les niega un procedimiento que puede salvar vidas”.
Por medio de un comunicado, subrayó que “no hay acceso al aborto en Texas”.
Apenas 30 días luego del fin de la histórica sentencia de 1973, la cual había señalado el procedimiento como un derecho, otros estados de medio oeste y del sur siguieron los pasos de Texas.
Ley contra del aborto
La normativa contra el aborto se denomina ley SB8 restrictiva, se le conoce como “ley de latidos del corazón”.
Esta ley SB8 permite que caiga todo el peso sobre las mujeres, doctores, expertos, proveedores de salud que realicen la actividad luego de las seis semanas de gestación.
La norma toma en consideración a la salud de la fémina si se encuentra en peligro. Pero, no excluye víctimas de violación o incesto.
A favor del aborto
Aparte de Limon-Mercado, existen otros grupos de derechos reproductivos que están a favor del aborto y contra de la nueva ley.
La directora Ejecutiva de Fund Texas Choice, Anna Rupani, expuso su punto de vista. “Esta ley no solo obliga a las texanas a huir del estado para acceder a la atención…Se verán obligadas a huir del estado; pero las más vulnerables, que no pueden viajar, se verán obligadas a llevar su embarazo a término”, expresó.
Univisión resaltó que las mujeres en Texas suelen descubrir su estado de gestación a los seis meses. Por ello, no están de acuerdo con la decisión.
