Dos emprendedores hondureños pisaron Estados Unidos con un mismo anhelo: el “sueño americano”. Deseaban prosperar, captar nuevas oportunidades laborales, consagrar el bienestar de su familia, desarrollarse a nivel económico y personal.
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Ambos nacieron en Honduras, pero llegaron al país con ideas de negocios diferentes. Rudy Cáceres es dueño de una barbería y Gracia Bertrand está al frente de un supermercado. Sin embargo, los dos se caracterizan por ser empresarios y llevar la batuta de un equipo.
El local de Cáceres, quien vive en la nación desde hace 20 años y cuenta con al menos 50 años de experiencia, se ubica en la ciudad de Metairie, Luisiana, cerca de Nueva Orleans. Por su parte, Bertrand arribó hace no más de seis años a Estados Unidos. Su negocio está localizado en Cincinnati, Ohio.
Rudy Cáceres: uno de los emprendedores hondureños exitosos
‘La H’ se llama la barbería del caballero de 73 años. Trabaja de 8.30 de la mañana a 7 de la noche, de lunes a viernes, y atiende a todo aquel que lo visite en su dirección: 3104 Cleary Ave, Metairie, LA 70002.
En entrevista con La Prensa Honduras, expresó: “Afuera vicios, hagan realidad sus sueños. Todos tenemos derechos a progresar y a trabajar, les deseo lo mejor y un enorme saludo para todo mi pueblo con mucho cariño, especialmente para San Pedro Sula”.
Pese a estar con parte de sus seres queridos en Estados Unidos, recuerda a diario a Honduras. “Extraño mucho mi país, por suerte gran parte de mi familia está aquí, pero uno siempre sueña con regresar a casa”, agregó.
Exjueza emprendedora: Gracia Bertrand
“El fraude electoral de 2017 me decepcionó, fue por eso por lo que renuncié en la corte y decidí buscar oportunidades en otros rubros. Ser una profesional versátil me llenaba de muchas expectativas, no quería estar atada a un solo oficio”, después de laborar en su región natal durante 18 años, en calidad de jueza, Gracia Bertrand forma parte de los emprendedores hondureños que hacen vida en Estados Unidos. Así lo explicó al Heraldo.
‘El Gran Valle Verde’ es el nombre del negocio de la exjueza, un supermercado que sacan adelante junto con sus socios: una pareja guatemalteca. “La idea del supermercado surgió porque cuando llegamos a este país, vimos la necesidad de los latinos en buscar productos nostálgicos y frutas de nuestro país. Siempre preguntaban por plátanos, crema, queso, donas, café, etc. Entonces, pensamos en poner un negocio con comidas típicas y que pudiéramos vender producto centroamericano”, precisó.
A futuro, esta dama parte de los emprendedores hondureños que crecen en la nación, aspira “ampliarlo a otros Estados donde hay más comunidad latina, ya que no solo enfocamos a hondureños. También deseamos abrir una red de apoyo a inmigrantes. Hemos visto la necesidad de apoyarles, ya que muchos empleados han sufrido malos tratos y violencia en este país”.