En muchas ocasiones la ilusión de embarcarse en la aventura del “sueño americano”, puede terminar muy mal para los indocumentados. Miles de migrantes toman la decisión de tratar de llegar a Estados Unidos, con el objetivo de encontrar una mejor forma de vivir para ellos y sus seres queridos.
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Los peligros que enfrentan los migrantes
Sin embargo, muchos no corren con la suerte de llegar al país de las barras y las estrellas y enfrentan diversos obstáculos. Algunos son estafados por los coyotes, otros son víctimas de la delincuencia en la frontera, también hay los que son aprehendidos por la patrulla fronteriza, sin olvidar los que pierden la vida en el intento.
Eso fue lo que les sucedió a los migrantes fallecidos, que fueron encontrados hace unos días en un camión, en San Antonio, Texas.
Altas tarifas por cruzar la frontera
A estas personas les cobraron cantidades exorbitantes de dinero, con la promesa de que los llevarían a Estados Unidos.
Las tarifas comenzaban en tres mil dólares, aunque aumentaban de acuerdo a su lugar de origen.
Eso sí, les dieron una garantía de 90 días para repetir el viaje, en caso de que fallara. Sin embargo, no imaginaron que el error terminaría con su vida.
“Tres meses de garantía. Tres meses de intentos”, era el pacto con el que los polleros sedujeron a los migrantes.
Ese mensaje fue compartido a Vice News por uno de los coyotes, el cual trabaja con el Cártel del Noreste, una de las organizaciones criminales más fuerte del estado de Tamaulipas, en México.
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El calor les cobró la vida
El individuo mencionó que el grupo delictivo monitoreaba la movilización de los 80 migrantes que fueron encontrados muertos o a punto de fallecer en la cabina trasera de un tráiler.
Eran precios que pocos alcanzan a pagar. Empezaban en tres mil dólares para los mexicanos que ya estaban en la ciudad de Camargo, pero para los originarios de países centro americanos, como Guatemala o Honduras, el precio ascendía hasta ocho mil 500 billetes verdes.
De acuerdo a la Oficina del Forense del condado de Bexar, hasta el pasado 29 de junio, ya habían recibido a 53 cuerpos de migrantes. Aunque se desconoce la identidad de todos, tienen el reporte de que al menos 27 son de origen mexicano, siete de Guatemala y dos de Honduras.
El camión fue encontrado a inicios de semana por un trabajador de la zona, que escuchó gritos de auxilio. Cuando llegaron las autoridades se percataron de las decenas de muertes y otras personas con problemas de salud, debido al golpe de calor y deshidratación. Durante el largo viaje tuvieron que enfrentar temperaturas superiores a los 100 grados Fahrenheit.
