MADRID, 28 (EUROPA PRESS)
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El director del Departamento de Seguridad Pública de Texas, Steven McCraw, lamentó ayer en rueda de prensa un fallo de juicio crucial por parte del mando de la operación policial al malinterpretar que el responsable de la masacre Salvador Rolando Ramos, había decidido atrincherarse en lugar de, como sucedió, abrir fuego indiscriminado -- aproximadamente un centenar de disparos -- contra los escolares dentro de una clase.
Por ello, Ramos acabó maximizando el número de víctimas (19 niños, dos profesores) mientras la Policía aguardaba en el exterior de la escuela en lugar de irrumpir para neutralizar al agresor, como manda el protocolo en el caso de un "tiroteo activo", que era lo que estaba ocurriendo, en lugar de un "atrincheramiento".
Todo ello, mientras los agentes recibían llamadas de los propios niños describiendo la realidad de la situación.
En rueda de prensa a última hora del viernes, Abbott se ha declarado "lívido" tras conocer que había recibido "información equivocada" sobre lo acontecido. "Espero que las fuerza de la ley y el orden investiguen lo ocurrido hasta el último detalle", ha declarado el gobernador texano.
El gobernador republicano ha pedido que investigadores determinen "hasta los segundos exactos de lo que sucedió con un 100 por 100 de precisión y explicarlo al público y, lo que es más importante, a las víctimas que han sido devastadas".
"Y quiero que me expliquen por qué no acabaron escogiendo la mejor estrategia para resolver la situación: entrar, neutralizar al asesino y rescatar a los niños", ha añadido en declaraciones recogidas por NBC.