Luego de los estragos causados por el coronavirus, cualquier brote de enfermedad causa pánico y miedo en la sociedad y los expertos sanitarios.
PUBLICIDAD
La llegada de la viruela del mono, la más grande de la historia fuera de África, ha hecho que una decena de países prendan las alarmas.
Y es que a excepción de algunos casos, este virus se había limitado a las regiones de África occidental y central, pero ahora se presenta una nueva situación que sorprende.
Es por eso, que las autoridades y especialistas se preguntas si la viruela del mono puede convertirse en pandemia, tal y como ocurrió con el coronavirus.
“Es bastante improbable”, dijo el profesor Brian Ferguson, del Departamento de Patología de la Universidad de Cambridge, a BBC Mundo.
Aunque parece haber un consenso de la comunidad científica sobe lo lejos que nos encontramos de que la viruela se vuelva una pandemia, es una cuestión válida; sobre todo, después de ver cómo una misteriosa neumonía en China se convirtió en la crisis sanitaria que todos conocemos.
El primer motivo por el que se considera improbable que se convierta en pandemia, es que es muy complicado de transmitir de un individuo a otra, a diferencia de los virus respiratorios como el SARS-CoV-2.
PUBLICIDAD
Y es que la transmisión de la viruela del mono ocurre cuando la persona entra en contacto con el virus, a través de un animal, humano o materiales contaminados.
Para tratar de contener el brote, es importante conocer los síntomas que se pueden presentar:
Dolor de cabeza.
Fiebre y escalofrío.
Dolor muscular.
Erupciones.
Ganglios linfáticos inflamados.
Agotamiento.
Todavía se desconoce el huésped repertorio (portador principal de la enfermedad) de la viruela del mono, aunque se sospecha de que roedores africanos participan en la transmisión. de acuerdo a las guías de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos.
Lo cierto es que los científicos descarten que la viruela del mono evolucione a pandemia, no implica relajarse en las medidas de protección.
De hecho, los especialistas consideran necesario recordar que los que vivimos es una muestra del peligro al que se enfrenta la humanidad con los virus emergentes, sobre todo, aquellos de origen animal.