BERLÍN, 14 (DPA/EP)
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La ministra alemana Exteriores, Annalena Baerbock, se ha declarado conmocionada por la violencia en el funeral del viernes en Jerusalén por la periodista de Al Yazira Shirín abu Aklé, muerta de un disparo en la cabeza el miércoles mientras cubría un enfrentamiento entre fuerzas israelíes y palestinas en Cisjordania.
Es triste «que el sepelio no haya podido tener lugar en paz y dignidad», ha señalado. «Sinceramente, en lo personal, estoy profundamente conmocionada», ha declarado Baerbock en el cierre de la cumbre del Grupo de los Siete celebrada en un balneario de Alemania.
En los videos del funeral se ve cómo las fuerzas de seguridad israelíes cargan con porras bastones contra los asistentes al sepelio y quienes cargaban el féretro.
Según la Policía, cientos de violentos intentaron sabotear la ceremonia y causar daños a los agentes, además de intentar llevarse el féretro a pie, en lugar de en los coches fúnebres designados.
Las imágenes desataron consternación en todo el mundo, sobre todo de Naciones Unidas, Estados Unidos y la Unión Europea. El Consejo de Seguridad de la ONU ha pedido, en este sentido, «una inmediata, amplia, transparente, justa e imparcial investigación» de la muerte de la periodista.
Por el momento, Israel ha admitido la posibilidad de que la periodista muriera por un disparo realizado por sus propias fuerzas, pero ha explicado que no pude llegar a conclusión alguna sin la bala que mató a la reportera, en poder de la Fiscalía palestina.