MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
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Cientos de manifestantes han salido a las calles este sábado en Jartum, la capital de Sudán, y en distintos puntos del país, en respuesta a los llamamientos de los Comités de Resistencia para reclamar justicia por las víctimas de la masacre del 3 de junio de 2019, según ha recogido la agencia estatal de noticias, SUNA.
Los manifestantes se han concentrado inmediatamente después del desayuno en las principales calles y plazas del país, portando fotografías de las víctimas y consignas denunciando la demora en la justicia, tal y como ha informado la cadena Sky News.
Las protestas de este sábado forman parte de una serie de manifestaciones que se llevan prolongando desde hace casi 6 meses contra el jefe del Ejército y presidente del Consejo Soberano de Transición, Abdelfatá al Burhan, responsable del Golpe de Estado en el país en 2021.
Según testigos, la Policía ha dispersado a la multitud con gases lacrimógenos en la calle Abdel Azim en Omdurmán, mientras que los manifestantes también han salido a las calles en el área de Al Kalalat, al sur de Jartum, o en Bahri, al norte de la capital, según ha recogido el diario ‘Sudan Ajbar’.
Estas movilizaciones aluden a la masacre del 3 de junio de 2019, cuando las fuerzas del Consejo Militar Transitorio utilizaron armas de fuego y gases lacrimógenos para dispersar una sentada en Jartum, matando a más de un centenar de personas.
La ONG Human Rights Watch (HRW) ha mostrado su preocupación esta misma semana ante los cientos de manifestantes detenidos «ilegalmente» por las fuerzas de seguridad de Sudán desde diciembre de 2021 y condena que hayan desaparecido decenas de ellos.
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Al Burhan resaltó en febrero que sólo entregaría el poder a un gobierno electo o a una autoridad surgida de un «consenso nacional», tras anunciar en enero la composición de un gobierno interino tras la dimisión a principios de enero del primer ministro, Abdalá Hamdok, en protesta por la represión de las manifestaciones.
Hamdok, detenido tras la asonada, volvió al cargo en noviembre tras un acuerdo firmado con Al Burhan en medio de las presiones internacionales. El pacto fue rechazado por parte de sus socios civiles, que denunciaron que suponía dar legitimidad a la asonada, si bien finalmente abandonó el cargo.
Las autoridades de transición fueron instauradas tras un acuerdo entre la junta militar anterior, surgida tras el golpe de Estado de 2019 contra Al Bashir, y diversas organizaciones civiles y formaciones políticas opositoras.