MADRID, 31 (EUROPA PRESS)
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La Procuraduría General de Colombia ha solicitado a las Fuerzas Armadas un «informe preciso» sobre una operación militar ejecutada a comienzos de semana y en la que murieron once presuntos disidentes de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
El organismo ha remarcado que, aunque la versión oficial apunta a que efectivamente los fallecidos pertenecían al Frente 48, integrantes de comunidades y organizaciones locales han informado de que los muertos no serían delincuentes, «sino que sería integrantes de la comunidad».
La Procuraduría ha recogido los testimonios de la Fundación Red de Derechos Humanos del Campesinado de Putumayo y ha advertido de que dicha información «resulta altamente contradictoria con la información oficial presentada por el Ejército y el Ministerio de Defensa Nacional a la opinión pública».
«Resulta entonces necesario recordar que los ataques contra población civil se encuentran proscritos por el derecho internacional humanitario, razón por la cual es imperativo que desde el comando central de las Fuerzas Militares se sirva aclarar lo acontecido», ha explicado el organismo colombiano en un comunicado difundido en sus redes sociales.
Al menos once presuntos integrantes de las disidencias FARC fallecieron y otros cuatro resultaron heridos en una operación del Ejército colombiano en el municipio de Puerto Leguízamo, en el departamento de Putumayo.
Además, las Fuerzas Armadas confirmaron que una mujer embarazada, a quien vinculaban con la extinta guerrilla, también había resultado herida en combate y, más tarde, trasladada a un centro de salud para ser atendida.
