MADRID, 29 Mar. (EDIZIONES)-
Drew Nicholson y su familia estaban visitando la estación de montaña de Powderking, en las Rocosas del Norte de la Columbia Británica (Canadá), cuando los miembros de la patrulla de esquí les echaron una mano para que Owen Nicholson, de cuatro años, no se perdiera una tradición de final de temporada.
El «Slush Cup» es una tradición del día de cierre de la estación, en la que los esquiadores intentan pasar por encima de un estanque de agua y llegar al otro lado.
Owen, entusiasmado como siempre por intentar el desafío, casi se pierde la diversión cuando la nieve hizo que su carrera fuera demasiado lenta para llegar al agua.
La siempre servicial patrulla de esquí entró en acción inmediatamente para llevar a Owen al otro lado del estanque en su tabla de snowboard, asegurándose de que tuviera un gran final de temporada.