MÁLAGA, 21 (EUROPA PRESS)
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El director ecuatoriano Javier Andrade ha presentado este lunes en el marco del 25 Festival de Cine de Málaga su nueva película ‘Lo invisible’, con la que compite en la sección oficial del certamen. La cinta profundiza en aspectos como la soledad, la salud mental y las diferencias de clase a través de un personaje femenino como protagonista central.
Luisa, de 45 años, regresa de un centro psiquiátrico después de una severa depresión posparto. Su deslumbrante hogar se vuelve su nuevo lugar de confinamiento, rodeada de su familia y una cuadrilla de empleados que se esfuerzan para que sus arrebatos permanezcan invisibles. Imposibilitada de seguir interpretando el rol de esposa y ama de casa perfecta, su única escapatoria es deslizarse elegantemente hacia la locura.
Javier Andrade y la productora María de los Ángeles Palacios han participado en una rueda de prensa desde el Cine Albéniz de la capital malagueña para presentar ‘Lo invisible’. En ella, el director se ha mostrado «contento» de representar a su país, Ecuador, con una película suya.
Andrade ha descrito la película como «pequeña e íntima» y ha explicado que es fruto de la colaboración directa con la actriz protagonista, Anahí Hoeneisen, que también es guionista de la historia: «La propuesta era trabajar con ella su personaje y aprovechar que también es guionista. Queríamos hacer una película muy linda de una persona que está muy sola y dibujar un escenario de melancolía y depresión», ha señalado.
La historia se desarrolla en un ambiente de silencios para centrar toda la trama en la protagonista. El director ha indicado que la idea era plantear una película más de experiencias que de argumento: «Queríamos construir un personaje y un entorno a partir de ciertos comportamientos que disparan temas de clase, salud mental y soledad».
En ese aspecto, sobre el trabajo interpretativo de la actriz protagonista, el director ha señalado que ella quería hacer una película particularmente femenina y ha explicado cómo preparó el personaje de Luisa: «Anahí hizo un trabajo muy profundo para encontrar síntomas de una depresión posparto para reflejarlo de manera realista en la historia».
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Por su parte, la productora María de los Ángeles Palacios ha valorado la apuesta de Andrade porque «es un reto para cualquier cineasta que una película se sostenga con tan solo un personaje».
Sobre su estilo de hacer cine, el director ha asegurado que le gusta que el espectador termine de escribir la historia por su cuenta, algo que se puede percibir en ‘Lo invisible’ y ha añadido que «la clave está en usar la imagen y sobre todo el sonido para construir un escenario abierto».
El director ecuatoriano ha explicado que a la hora de hacer una película diseña un plan estratégico con el equipo antes de rodar, pero que siempre que llegan al set de rodaje todo se replantea: «El resultado es una combinación de estar expuesto a lo que puede suceder en el set y las ideas planteadas antes», ha asegurado.
En la película aparece un personaje muy peculiar, el de una asistenta de muchos años de edad que sirve de apoyo en muchos momentos difíciles a la protagonista que sufre depresión: «Fue la propia Anahí quien la encontró en un centro comunitario de Quito. No es actriz profesional, solo ha participado en obras de teatro en ese centro», ha contado Andrade.
El director ha hablado también de la historia de una nana quechua que canta ese personaje al final: «No estaba escrito que apareciera esa canción, pero queríamos cerrar con una emoción desbordada. Le preguntamos que nana podría cantar y ella misma propuso ‘Manila’, así se llama la canción». Además, ha añadido que no conocieron la autoría del tema hasta el momento de rodar la escena, cuando le avisó un amigo productor de que podía usar los derechos de la canción, ha concluido.
