MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
Los ministros de Unidas Podemos se conjugaron para calmar los ánimos y rebajar la tensión en el seno de la coalición, ante las diferencias por el envío de armas a Ucrania.
De esta forma, ayer los ministros y secretarios de Estado del socio minoritario del Ejecutivo mantuvieron ayer un encuentro para reconducir la situación y reforzar la unidad en el espacio, según han explicado varias fuentes del espacio confederal.
También, según ha adelantado ‘El País’ y ha confirmado Europa Press, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, y la ministra de Derechos Sociales y líder de Podemos, Ione Belarra, mantuvieron contactos el domingo con ese objetivo.
Paralelamente, la ministra de Igualdad, Irene Montero, mantuvo una conversación ayer a primera hora con el titular de Presidencia, Félix Bolaños, y ambos quedaron en que los portavoces tanto de PSOE y Podemos destensarían el clima, como así se produjo tras las reuniones de las respectivas ejecutivas. Además, tanto Montero como Belarra informaron a sus compañeros de esas gestiones con el ala mayoritaria del Ejecutivo.
Tras este encuentro, otras fuentes del espacio confederal dan por solucionada este episodio de tensión, que también afectó al seno de Unidas Podemos con la división de respuestas ante la decisión anunciada la semana pasada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de enviar material ofensivo de forma directa a la resistencia ucraniana.
Y es que por un lado Díaz, el titular de Universidades y el dirigente de En Comú Podem, Jaume Asens, apoyaron la medida mientras que Belarra, Montero y el portavoz parlamentario en el Congreso, Pablo Echenique, mostraron su crítica al entender que era un «error», por no ser efectivo y no cambiar la correlación de fuerzas en el conflicto.
A su vez, la revista ‘LaU’, que dirige el ministro de Consumo y líder de IU Alberto Garzón, publicó el domingo un artículo en el que se avisaba de que un posible escenario electoral sin la vicepresidenta segunda como candidata de la izquierda, traería posiblemente un «acusado retroceso» de Unidas Podemos que llevaría al espacio a un «punto de no retorno». También se apuntaba a que era posible que Díaz tuviera «presiones» por parte de fuerzas del espacio confederal y que ello podría generar un clima de «asfixia».
Ayer esa bajada de tono y descenso de la tensión se visualizó en sendas ruedas de prensa de PSOE y Podemos, así como en el acto institucional por la conmemoración del 8M.
LOS PARTIDOS VISUALIZARON ESA VOLUNTAD DE CALMA
La coportavoz de la formación morada, Isa Serra, recalcó que el presidente del Gobierno puede contar con su apoyo para que el Ejecutivo siga avanzando y aclaró que su líder, Ione Belarra, no se refería a los socialistas cuando ayer criticó a los «partidos de la guerra», explicando que simplemente aludía al «furor belicista» de la derecha.
Mientras, su homólogo socialista, Felipe Sicilia, defendió la «unidad» del Gobierno sobre las acciones en Ucrania y señaló que ningún miembro del Ejecutivo ha puesto en cuestión las decisiones del presidente Pedro Sánchez. Por tanto, sostuvo que «no hay tema» con Podemos a pesar de las discrepancias por el envío de armas.
Paralelamente, esa distensión también apreció en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, con la presencia de Sánchez en el acto organizado, que se confirmó ayer, por el Ministerio de Igualdad por el 8M, donde coincidió con Montero y la secretaria general de Podemos.