Nacido en España y nacionalizado estadounidense, el chef José Andrés viajó recientemente a la frontera de Polonia para poder aportar con su amplia y reconocida experiencia gastronómica y ayudar a las personas en situación de refugiados ya que han tenido que huir en los últimos días por la lamentable situación de invasión territorial por parte de Rusia en Ucrania.
José Andrés en el medio gastronómico
En el exclusivo mundo gourmet, José Andrés se mueve como pez en el agua. Es considerado como uno de los cocineros más reconocido en todo el mundo y ha sido también uno de los más galardonados y distinguidos.
Con 52 años, entre sus características más resaltantes ha sido el ser discípulo de nada más y nada menos que Ferrán Adriá en el establecimiento “El Bulli” (varias veces elegido el mejor restaurante del planeta). A esto se le suma que ha sido galardonado con cuatro estrellas de la Guía Michelin y lleva una trayectoria de más de 20 años en los Estados Unidos.
Facetas humanitarias del chef
No es la primera vez que Andrés es vistos en movimientos humanitarias. Ya ha sido nominado al Premio Nobel de la Paz por distintas actividades con World Central Kitchen (WCK), una ONG que dirige desde el pasado 2010.
El chef llegó a la frontera con Polonia el domingo 27 de febrero para organizar un plan de asistencia. Su organización ya sirvió más de 8000 comidas calientes en el puesto fronterizo de Medyka, y otras tantas en Rumania.
Al respecto, José Andrés informó sobre la campaña que comanda por vía de un video grabado desde la plaza Rzeszów y publicado en su cuenta personal de Twitter. “Me encuentro con tantos refugiados, familias que están escapando y no saben qué sigue. Haremos todo lo posible para no decepcionarlos”.
José Andrés apuesta por más
En las últimas horas se dio a conocer por parte del mismo chef que él mismo le pidió al presidente de Ucrania, Volodímir Zelensky, le permita entrar y salir del territorio nacional para poder alimentar a los miles de desplazados por la invasión rusa. “Si World Central Kitchen recibe el permiso, podremos alimentar a los miles de hombres y mujeres que están esperando para estar a salvo. Sabemos que tiene cosas más importantes que hacer, pero esto también es importante, señor”.
Se indicó que en las próximas horas la ONG recibirá en la zona de Rzeszów (90 kilómetros de la frontera con Ucrania), 40 toneladas de ayuda humanitaria, entre lo que destaca fogones, equipos isotérmicos para mantener la comida caliente, paelleras de tamaño industrial, fiambreras y otros materiales de cocina que los voluntarios utilizarán para preparar las comidas.