En horas recientes se hizo viral la historia de éxito de una niña australiana que, con solo 10 años, se ha convertido en toda una empresaria. Se trata de Pixie Curtis, quien se gana casi tres millones de pesos al mes con dos negocios montados entre ella y su madre, la magnate de las relaciones públicas Roxy Jacenko.
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“Una de sus compañías, Pixie’s Bows, se dedica a la venta de accesorios para el cabello, mientras que la primera empresa Pixie’s Fidgets está centrada en los juguetes. El negocio comenzó en mayo de este año y tras las primeras 48 horas los juguetes se agotaron”, citó el portal Aristegui noticias.
La historia es muy distinta a la de cualquiera de otra generación, según explicó la madre de Pixie al diario británico The Sun. “Lo más emocionante para mí es el espíritu emprendedor que tiene a una edad tan joven. Yo nunca lo tuve, aunque me inculcaron que tenía que triunfar (…) cuando tenía 14 años, conseguí un trabajo en McDonald’s porque eso es lo que hacías en mi época”, contó Roxy.
Ventas envidiables
La madre de la niña ejerce como directora de la firma de relaciones públicas Sweaty Betty PR, en Sidney, Australia. Ella es considerada, junto a su esposo Oliver Curtis, por sus habilidades para los negocios, de allí que no sea de extrañar que su pequeña hija le siga los pasos, y hasta la supere.
Las tiendas son todo un fenómeno en ventas. Tras el lanzamiento de su última marca en mayo de este 2021, la pequeña se ha ganado 135 mil dólares en el primer mes, precisó El Heraldo de México.
Además de ser un fenómeno como emprendedora, la niña se está convirtiendo en el foco de atención por los lujos que está empezando a disfrutar. En ocasión de su cumpleaños número 10 le dieron regalos muy exclusivos, como un bolso de Prada y unas chanclas Balenciaga amarillo fosforescente que tienen un valor superior a los 7 mil pesos.
“Entonces, supongo que para mí lo más importante es su impulso como emprendedora”, dijo Roxy al famoso tabloide británico. Este mes, en ocasión de la Navidad, Pixie donó obsequios por un valor de 80.000 dólares a la casa de Ronald McDonald, en Randwick, Sydney. Al sitio llegó en su propia van timbrada con los colores y el nombre de la empresa.
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Cien mil seguidores
Como si se tratara de una misión “corporativa”, todos en la familia de Pixie parecen apuntar al mundo de las ventas. Su hermano menor, Hunter, de siete años, también posee su propia empresa creada por su famosa madre.
La tienda será, por ahora, de gorras. El niño es modelo de los productos que vende la familia y se perfila como otro exitoso empresario.
La niña Pixie Curtis cuenta con poco más de cien mil seguidores en su cuenta en Instagram. Ella misma es la modelo de la ropa para niñas que ofrece su tienda al por menor. Muestra los lugares que visita y momentos familiares junto a su hermano y sus padres.
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