Yalitza Aparicio prácticamente saltó a la fama de la noche a la mañana. Protagonizó hace 3 años la película Roma, de Alfonso Cuarón, proyecto que la lanzó a la fama como actriz demostrando que tiene un inmenso talento interpretativo.
Pero la vida de la actriz antes de la premiada cinta era bastante modesta y sencilla en Tlaxiaco, la localidad de Oaxaca de donde es oriunda. Jamás se imaginó que alguien le pediría un autógrafo, por lo que nunca se preparó para ese momento… hasta que llegó de sorpresa en el estreno de la cinta en el Festival de Cine de Venecia en 2018.
Yalitza Aparicio cuenta la historia de cómo fue su primer autógrafo
En el más reciente video publicado en su canal de YouTube, la mexicana de 27 años recordó cómo fue la primera vez que dio un autógrafo, un momento que reconoce como emocionante pero también algo extraño e improvisado.
«Muchas veces me han preguntado cómo fue mi primer autógrafo. La verdad fue algo bonito pero extraño y algo preocupante para mí, porque era la primera vez que me lo pedían y yo no tenía una idea de cómo lo iba a hacer», dijo al inicio del video.
Reconoció que tanto a ella como a Nancy García, otra de las actrices debutantes en la película, les habían recomendado practicar algún tipo de autógrafo ya que después del estreno se volverían famosas. «Sí me habían dicho que preparáramos un autógrafo porque en algún momento nos iba a tocar, pero pues nunca pensamos que ese momento llegaría tan rápido. De ese tema habíamos hablado poco antes la presentación de la película en Venecia», manifestó.
Entonces, justo después del estreno de la película, cuando todavía estaban emocionadas por ver todas las escenas… se les acerca un caballero para pedirles sus autógrafos:
Fue algo bastante improvisado: «Plasmamos lo que se nos cruzó por la mente en ese momento. Recuerdo que este caballero estaba muy emocionado, nos felicitó, lo poco que logramos comprender y simplemente continuamos nuestro camino. Fue como bueno, un autógrafo, ya pasó, okey».
Lo del autógrafo dejó pensativa a Yalitza Aparicio, porque no sabía si el autógrafo improvisado era el que tenía que dar por el resto de su carrera, o si podía mejorarlo.
«Así que estuve dudándolo, se vino a mi mente un momento en el que yo había visto a Alfonso Cuarón dar varios autógrafos y me di cuenta en ese momento que cuando eliges un autógrafo, tiene que ser algo con afecto a las personas que te lo están pidiendo pero también algo que no sea tan largo, desde mi punto de vista», enfatizó.
Más adelante creó un autógrafo ajustado a lo que ella quería: una firma corta, sencilla pero con mucho sentimiento y significado para cada uno de sus fans.