El próximo 19 de diciembre, Saúl “Canelo” Álvarez regresará al ring, tras un año de ausencia, para medirse a Callum Smith.
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El mexicano es hoy la cara del boxeo mundial, su éxito ha traspasado fronteras y se perfila como el favorito en la contienda.
«Canelo», de vender paletas a ser millonario
Pero no siempre fue miel sobre hojuelas en la vida del mexicano; de hecho, cuando era niño se dedicó a vender paletas de hielo.
A los cinco años, el pugilista ya estaba trepado en los camiones, vendiendo su mercancía; incluso, ayudaba a su papá a empujar el carrito de aguas, con la firme idea de conseguir dinero para salir adelante junto con sus siete hermanos.
Su pasión por los guantes la descubrió cuando iba a funciones de boxe, con sus familiares; incluso, el deporte fue una vía para controlar a un niño inquieto, que peleaba mucho en la escuela.
Con el permiso de su padre, “Canelo” se inscribió al gimnasio Julián Magdaleno, en donde conoció a Don Chepo y Eddy Reynoso, quienes hoy son sus entrenadores.
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El trabajo trajo sus frutos
Con el pasar de los años, Álvarez se ha ido consagrando en el pugilismo; de hecho, es el rival a vencer de muchos pugilistas.
Pero ese trabajo ha traído recompensas, pues “Canelo” es uno de los boxeadores que más ganan en el mundo; incluso, en 2018 rompió récord, al firmar un contrato de más de 365 millones de dólares con la plataforma digital DAZN.
A su arribo a la ciudad de San Antonio, Texas, para su enfrentamiento ante Callum, el pugilista mexicano sorprendió a propios y extraños con el atuendo que traía puesto.
Y es que, Saúl lució una de sus clásicas pijamas de Dolce & Gabbana, la cual tiene un valor aproximado de dos mil dólares, un lujo que el campeón azteca se puede dar.
