Dormir continuamente puede llegar a ser una tarea titánica e incluso imposible para algunos, situación que indudablemente genera o generará en el corto plazo importantes problemas que impactan de manera seria y negativa la salud humana.
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Por ello, es importante plantearse algunos hábitos diarios que ayuden a descansar lo mejor posible en las noches y que eviten que por distintas circunstancias las personas deban de despertarse o desvelarse en las madrugadas.
Nerina Ramlakhan, fisióloga especializada en terapia del sueño, explica que no dormir suficientes horas y acostarse demasiado tarde pueden ser un verdadero problema. Además, las largas jornadas de trabajo sin descansos, no beber suficiente agua y no desayunar hasta dos horas después de levantarse pueden impactar la calidad del sueño cuando corresponda descansar.
“Aconsejaría mirar o leer algo que afirme la vida e inspire antes de acostarse. Necesitas decirle a tu mente y a tu cuerpo que estás viviendo en un mundo donde también suceden cosas buenas, así que guarda las historias de terror para el día. Cuando experimentes un sueño profundo y reparador, te sentirás físicamente rejuvenecido, emocionalmente equilibrado, mentalmente alerta y espiritualmente conectado”, explica la especialista británica.
4 técnicas que te ayudarán a dormir mejor
- Desayunar dentro de los 30 minutos posteriores a levantarse y asegurarse de incluir algo de proteína.
- Disminuir el consumo de cafeína y dejar de utilizarla como sustituto de la comida, especialmente en el desayuno. Nada de cafeína después de las 3 de la tarde e idealmente no más de dos cafés al día.
- Aumentar la hidratación a dos litros de agua al día.
- Acostarse más temprano al menos cuatro noches a la semana. Tratar de estar en la cama entre las 9:30 y las 10 de la noche y tratar de relajarse, leer y meditar. No utilizar ningún dispositivo electrónico.
