A pesar de que en la mayoría de los casos los seres humanos se bañan a diario y muchas veces en reiteradas ocasiones en el mismo día, muchos son los que por distintas razones dejan pasar por alto el cuidado del cabello, situación a la larga puede generar irritación capilar y asimismo, sequedad, picazón y caspa.
Por ello, el mundo de la medicina asegura que los cuidados del cuero cabelludo debe tener el mismo seguimiento que por ejemplo, la salud facial. Además, cada persona debe de saber las características de su cabello (textura, tipo, genética, estilo) para así saber como atacar y contrarrestar un posible problema.
Scalp Care
Es acá donde toma un gran protagonismo el Scalp Care, un tratamiento para el cuero cabelludo sin enjuague que brinda hidratación instantánea y un alivio duradero de la descamación, picazón e irritación del cuero cabelludo seco.
Este tratamiento ayuda a eliminar las impurezas y los productos acumulados en las raíces que pueden hacer que el cabello parezca graso, sin vida o totalmente apagados, esto por la exposición diaria al sol, la contaminación o la acumulación de mousses y sprays, causando que probablemente el cuero cabelludo se sienta o se vea congestionado.
Tipos de cuero cabelludo
- Normal: sus cambios son bastante fáciles de corregir y no se vuelve demasiado graso o seco, incluso saltando algunos lavados de pelo.
- Graso: se caracteriza por una producción excesiva de sebo. Tiende a tener una apariencia grasosa y habitualmente se siente pegajoso al tocarlo. Además, es más propenso a la caspa y puede producir la obstrucción de los folículos pilosos.
- Seco: carece de suficiente producción de sebo, lo que lo hace propenso a la resequedad y la descamación. La piel puede sentirse tensa, con picazón o irritada, y la caspa es común.
- Sensible: debido a un desequilibrio en la producción de sebo, a la contaminación o al estrés, es muy propenso a la irritación.