Un estudio llevado a cabo por científicos de la Universidad de Harvard compartió los beneficios de comer soja y de los productos derivados de ella, como puede ser el tofu, el miso, las proteínas en polvo, muchas alternativas vegetarianas a la carne y la leche de soja.
Y es que gracias a los nutrientes que proporciona esta legumbre, puede prevenir el desarrollo de varias enfermedades como la osteoporosis o el cáncer, en especial, el cáncer de mamá o de próstata.
Asimismo, los alimentos elaborados a partir de la soja son ricos en fibra, potasio, vitaminas B, magnesio o proteínas de alta calidad. De hecho, las proteínas en polvo hechas de soja son las más completas, ya que aportan nueve aminoácidos esenciales a nuestro organismo.
Hay que tener cuidado de no consumir soja en exceso
Este estudio llevado a cabo por la Universidad de Harvard también expuso que se debe tener cuidado de no excederse con el consumo de soja debido a su alto contenido en isoflavonas.
Las isoflavonas son un tipo de estrógeno de origen vegetal que producen una serie de efectos sumamente complejos en el cuerpo humano. Curiosamente, gracias a ello, se vuelve una buena opción para mujeres que están a punto de entrar en la menopausia o que tienen menopausia.
Además, según este estudio, las isoflavonas podrían reducir el riesgo de sufrir eventos cardiovasculares en ciertas demografías.
Por lo tanto, la soja y los productos que se obtienen de ella, se deben consumir moderadamente, así que es un ingrediente a tener en cuenta en nuestra dieta regular.
No obstante, comer soja en exceso incrementa el riesgo de declive cognitivo y eleva los niveles de hormona estimulante tiroidea, por lo que puede interferir con la medicación hormonal utilizada para tratar el hipotiroidismo.