Para las personas alérgicas, comer fuera de sus casas es un reto, pues cualquier equivocación en cuanto a los productos que les sirvan, podría poner en riesgo su salud y sus vidas. Al mismo tiempo, este sector de la población, constituye un desafío para los locales de comida y empresas alimenticias en general, que deben cumplir con las estrictas normas de información del producto para no afectarlos.
El riesgo de las personas alérgicas y la responsabilidad de las empresas alimenticias en cuanto a su atención, los puso en el tapete el caso de Anna Bellisario, una joven italiana, de 20 años, alérgica a la leche, quien murió por haberse comido a finales del año pasado, un tiramisú que había pedido como vegano en un restaurante y que le sirvieron como tal.
La historia de la joven la reseñó el portal La Vanguardia. La chica estaba en el restaurante de Milán cenando con su novio. Le sirvieron el tiramisú como vegano, ya que ella lo pidió así por su alergia a la leche, una condición de nacimiento.
Mientras disfrutaba el dulce, la chica comenzó con los síntomas propios de su alergia por la leche. Comenzó con un ataque de tos y problemas para respirar. Ella corrió al baño para provocarse el vómito, también tomó la medicina que siempre tenía en su cartera para tratarse ante cualquier reacción alérgica, sin embargo, presentó un shock anafiláctico y se desmayó. La llevaron al Hospital San Raffaele, donde entró en coma y 10 días después, murió.
Investigación y sanciones
Las averiguaciones demostraron que el tiramisú tenía leche. En el restaurante no cumplieron con el pedido hecho por la chica y pusieron su vida en riesgo.
Luego, descubrieron que la falta estaba por parte de la pastelería que proveía al restaurante, ya que les entregaban el tiramisú como vegano, cuando realmente no lo era.
La Vanguardia expuso que según El Corriere della Sera, la policía investiga a las propietarias de la pastelería, quienes son madre e hija. Ambas podrían ser acusadas de homicidio involuntario porque la leche no estaba notificada en la etiqueta del tiramisú y esto mató a Anna.
El caso causó revuelo en cuanto a las normas de etiquetado de los productos en Italia. Cualquier información que no esté detallada puede poner en riesgo para las personas alérgicas o con alguna enfermedad.