La “dark web”, ese rincón siniestro de internet al que se accede a través de navegadores especiales, sigue siendo un misterio para muchos. A menudo, se asocia con actividades ilegales y mercados clandestinos, y un reciente podcast ha arrojado luz sobre algunos de los horrores ocultos en este submundo cibernético.
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En una entrevista con el experto en ciberseguridad Ryan “Zero Day” Montgomery, los podcasters Ashton Bingham y Art Kulik exploraron el oscuro mundo de la “dark web”. Montgomery reveló cómo es posible obtener fácilmente cuentas de PayPal hackeadas con saldos sustanciales por una fracción de su valor real. Pero eso no es lo peor que se puede encontrar en esta parte oscura de la red.
Todo sobre la “dark web” explicado por un experto en ciberseguridad
La “dark web” ofrece un mercado clandestino donde se puede acceder a todo, desde drogas duras hasta armas de fuego y tarjetas de crédito robadas con un simple clic. Lo aterrador es que los criminales que operan en estos sitios parecen estar casi completamente inmunes a la persecución. Como lo explicó Montgomery: “Las personas que dirigen estos sitios web... algunos de ellos son muy experimentados en anonimizarse”.
Esto significa que, aunque ocasionalmente los paquetes con productos ilegales puedan ser interceptados en ruta, los vendedores son prácticamente imposibles de rastrear. Uno de los sitios perturbadores que llamaron la atención de los podcasters se llama “Carne Humana”. Este sitio promete vender paquetes de carne a posibles caníbales.
Su espeluznante lema es: “Recogemos nuestra carne principalmente de morgues... los accidentes de carretera son nuestro placer culposo”. Más allá de la retórica macabra, el sitio web defiende la idea de que comer carne humana no es inmoral, siempre y cuando no se mate a la persona.
El peor rincón de la web
Lo más escalofriante es que este no es un caso aislado. La “dark web” ofrece incluso órganos humanos vivos para su compra, sin hacer preguntas sobre su procedencia. Los comerciantes prometen a los posibles compradores que solo necesitan proporcionar sus datos médicos y ellos encontrarán un donante compatible.
El precio de un corazón humano, por ejemplo, se cotiza en 75 mil dólares. La “dark web” es accesible a través de un navegador especial llamado TOR (The Onion Router). Montgomery enfatizó que este rincón oscuro de internet alberga una amplia variedad de actividades ilegales.