De una y mil maneras se ha tratado de concientizar a lo largo de los años para que las personas que manejen automóviles no incurran en la utilización de teléfonos celular para así evitar accidentes fatales tanto en ellos como para quienes los rodean, sin embargo, según las estadísticas de mortalidad a nivel mundial, lejos se está de cumplir con el objetivo.
Varios estudios indican que la población más joven entre los adultos es quienes sienten la necesidad de revisar su aparato de comunicación mientras está sentado detrás de un volante, por ello, las estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) no se equivocan cuando reflejan que las personas entre los 18 y 30 años son quienes más fallecen por accidentes de tránsito.
Investigación
Llevada a cabo en el Reino Unido por la empresa Carmats, entre más de 1.300 personas mayores de 17 años, se aseguró que uno de cuatro jóvenes que nacieron entre 1997 y 2012 usa desmedidamente el celular mientras conduce.
Mientras que el 26% de los centennials reconoció que chequea el teléfono al cabo de un cuarto de hora de conducción; personas de otras edades también admitieron esa “necesidad”. De acuerdo a la encuesta, un tercio de los consultados dijo que piensa revisar el smartphone, incluso con las manos al volante. Además, una de cada 12 personas incluso señaló que ha enviado mensajes de texto mientras conducía.
Para explicar un poco la magnitud de la problemática, en el Reino Unido, lugar que si las autoridades detienen a un ciudadano usando su teléfono móvil mientras maneja o es captado por las cámaras policiales que habitan las ciudades, es multado con hasta 1.000 libras esterlinas, que equivale a unos 1.200 dólares aproximadamente, por cada hora de conducción vehicular se estima que se distrae por la utilización del celular entre 15 y 20 minutos.