Para muchos, obtener los poderes de Spider-Man es todo un sueño. La fantasía de los orígenes de superhéroes apela mucho a esa esperanza de grandeza que existe en la mayoría de los seres humanos. Sin embargo, los poderes arácnidos no son más que eso: una fantasía. Esto fue algo que no sabía un pequeño de 8 años en Bolivia, que se dejó morder por una viuda negra en busca de que obtener los poderes del personaje de Marvel.
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De acuerdo con ABC, el incidente del niño picado por una araña tuvo lugar el fin de semana en Bolivia, en la región andina de Oruro. El responsable del Programa de Enfermedades Zoonóticas del Servicio Departamental de Salud (Sedes) dijo que el menor encontró a una viuda negra cerca del río, debajo de una piedra, y “sin medir riesgos, la habría alzado, según indica él, la habría puesto en la parte posterior de la palma donde el arácnido le ha hecho la picadura respectiva”.
El niño contó que quería volverse el Hombre Araña
Después de hacer eso, el niño se llevó a la araña en un vaso, y unas dos o tres horas después de haber sido picado, empezó a tener dolor de huesos y contracturas. Al principio no quería revelarle a su mamá lo que le había pasado, pero luego de mucha insistencia le dijo la verdad, y así fue llevado a un centro de salud en la localidad vecina de Vinto, donde fue atendido de emergencia.
Gracias al suero antídoto, el menor sobrevivió a la picadura de la viuda negra. Ernesto Vásquez, el responsable del Sedes, declaró que la intención del niño era obtener los poderes de su superhéroe favorito (vía ABC): “Estamos sumamente preocupados porque el análisis y las preguntas al niño cuando ya estaba recuperado, nos llama la atención que habría alzado al arácnido con un simple propósito, indicando de que quería volverse Hombre Araña”.
Vásquez pidió a los padres que hablen con sus hijos, sobre todo con los menores a 11 años, para que les adviertan que las picaduras de arañas como viudas negras pueden ser letales si no se atienden a tiempo. El medio aseguró que ya se dio un caso similar en 2020, en la localidad rural de Chayanta, donde tres niños de 12, 10 y 8 años se dejaron picar por una viuda negra para obtener poderes de Spider-Man.
