Con esta poderosa mezcla podrás quitarle el color amarillento a las almohadas

Las almohadas, pese a ser uno de los objetos más usado en la casa, suelen ser también las menos atendidas. El poco lavado que ellas reciben suele resultar en que acumulen suciedad por mucho tiempo y se les produzcan manchas amarillentas que son muy difíciles de sacar. Seguramente ya has podido notar que este es un “padecimiento” que sufre tu almohada, por lo que hoy te venimos a hablar de un truco de limpieza que no falla.

Muchas cosas pueden influir en que ocurra este problema del color amarillento, ya sea la grasa del cabello, la saliva que cae de nuestra boca al dormir o el propio desgaste producto del paso del tiempo. Ante esto, la limpieza de la almohada es imperativa, pues también es el objeto que está más cerca a nuestro rostro y puede incluso llegar a perjudicar nuestra salud.

Aunque estas manchas si son una señal de la falta de higiene del elemento de descanso, pero también es una señal que explica cómo no nos fijamos en pequeños detalles y nos detenemos a hacer la limpieza de nuestra almohada. A continuación, te presentamos un truco infalible que además será económico.

Así puedes quitar las manchas amarillentas de tus almohadas

Para limpiar las almohadas no deberás hacer grandes gastos económicos, ya que bastará con combinar dos ingredientes que tenemos en casa. Por un lado, tenemos al jabón para platos o trastes, y por el otro el agua oxigenada. Las propiedades de ambos ingredientes nos asegurarán resultados magníficos.

Procedimiento

1. En un envase rociador o atomizador, verter jabón líquido para platos o detergente, hasta la mitad.
2. La otra mitad se debe llenar con agua oxigenada.
3. Mezclar para que se integren los ingredientes.
4. Rociar las manchas con la preparación.
5. Refregar con paciencia y constancia las manchas utilizando un cepillo de cerdas suaves.
6. Con una toalla medio húmeda, presionarla sobre la almohada para retirar la suciedad restante.
7. Dejar secar al sol la almohada.
8. De esta forma, notaremos cómo las almohadas han dejado en el olvido esas manchas amarillentas que tanto nos molestan.