Estilo de Vida

Salud mental: dejar de fumar ayuda a mejorarla

Una nueva investigación indica que dejar el cigarrillo disminuye los trastornos mentales

Las estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) son bastante clara cuando aseguran que el consumo de tabaco es la causa principal de enfermedades que derivan en muertes en todo el planeta, por ello, la gran insistencia de distintos entes de salud para insistir en campañas que ayuden a disminuir la cantidad fumadores.

Ante la premisa, muchos fumadores intentan cambiar su vida y dejar de fumar, sin embargo, la tarea puede ser verdaderamente difícil y existen también otros quienes continúan fumando alegando que es una gran ayuda para aliviar el estrés ya que existe una percepción generalizada de que los cigarrillos tienen un efecto calmante.

Una nueva investigación asegura que dejar de fumar puede también disminuir los niveles de ansiedad y depresión y mejorar la salud mental, tanto en las personas que padecen trastornos psiquiátricos, como en las que no tienen este tipo de problemas.

Beneficios mentales por dejar de fumar

Las conclusiones de los estudios fueron publicadas en la revista JAMA Network Open y todo fue llevado a cabo por especialistas del Departamento Nuffield de Ciencias de la Salud de Atención Primaria de la Universidad de Oxford.

El ensayo clínico, denominado Evaluating Adverse Events in a Global Smoking Cessation Study (EAGLES), que se realizó en 140 centros de 16 países entre 2011 y 2015 evaluó los cambios que se producían en la salud mental después de dejar de fumar mediante los datos de 4.260 adultos fumadores, de los cuales el 55,4% presentaron antecedentes de enfermedad mental.

Paul Aveyard, profesor de medicina conductual en el Departamento de Ciencias de la Salud de Atención Primaria de Nuffield en Reino Unido y uno de los autores del trabajo, detalla que, si bien fumar brinda un beneficio a corto plazo, también causa importantes problemas. “Sin fumar, la salud mental mejora en promedio. Nuestro estudio se une a otros que muestran que cuando las personas dejan de fumar su salud mental mejora, mientras que aquellos que no dejan de fumar no mejoran”.

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