Automáticamente que se menciona la palabra desayuno se nos viene a la cabeza el gran sabor del jugo de naranja, sin dudas, uno de los complementos alimenticios favoritos por excelencia para millones de personas, no obstante, sus cualidades no solo radican por su gran sabor, ya que la ciencia se ha encargado a lo largo de la historia en demostrar sus grandes beneficios para la salud humana.
Por ejemplo, la Universidad de São Paulo, Brasil, demostró en el pasado que el jugo cítrico puede mejorar la inmunidad, reducir la presión arterial, regular la producción de insulina y promover cambios en el perfil de las grasas en la sangre. Ahora, la misma casa de estudio concluyó que también proporciona un cambio positivo en el perfil del microbiota intestinal.
Beneficio del jugo de naranja en personas obesas
El estudio se basó en voluntarios con obesidad, resistencia a la insulina y prediabetes. Los pacientes recibieron cada día en dos períodos distintos un vaso de 400 mililitros de jugo de naranja natural.
“Seleccionamos pacientes con este perfil porque son los que suelen tener las condiciones que afectan más negativamente al microbiota, lo que lleva a una condición llamada disbiosis, una situación en la que hay un mayor número de microorganismos patógenos en el intestino, en comparación con aquellos que se consideran beneficiosos para la salud”, explicó el investigador Eric Tobaruela.
El especialista aseguró que, en tan solo 15 días de consumo, el jugo pudo proporcionar resultados positivos en los pacientes, hallazgo de suma importancia porque comúnmente modificar el perfil del microbiota es un proceso que generalmente lleva mucho tiempo.
“Los beneficios pueden ser transitorios porque un perfil de microbiota formado a lo largo de la vida tiende a restablecerse después del final de una exposición, volviendo a ser como era antes”, advierte Tobaruela y enfatiza la gran importancia de tomar constantemente el jugo de naranja para sacar provecho al máximo sus diversos beneficios.