Todos sabemos de los grandes beneficios que aporta el ajo a nuestra salud, pero muy pocos conocen lo bueno que también resulta ser la cúrcuma para nuestro organismo, gracias a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.
De hecho, varios expertos recomiendan consumir cúrcuma para aliviar la inflamación provocada por algún trastorno, como la enfermedad de Crohn, el colon irritable, los trastornos menstruales, la colitis, el síndrome del túnel carpiano, las enfermedades del intestino, la artritis, la obesidad, y muchos otras más.
Mientras que el ajo puede ayudar en patologías relacionadas con el sistema sanguíneo y el corazón, como la presión alta, las enfermedades de las arterias coronarias, el colesterol alto, los ataques al corazón y la arteriosclerosis.
Estos dos ingredientes también resultan ser antibacterianos y diuréticos, por lo tanto, ayudan a desparasitar el cuerpo de forma natural y también a eliminar las toxinas no deseadas de nuestro sistema.
¿Cómo preparar un té con cúrcuma y ajo?
Cabe resaltar que el Departamento de Farmacología del Colegio de Medicina de la India encontró que nuestro cuerpo no absorbe la cúrcuma tan fácilmente, por lo que recomienda su consumo junto a la pimienta negra, ya que contiene piperina, una sustancia capaz de incrementar la concentración de la cúrcuma, y esto favorece sus efectos en nuestro organismo.
Así que, para preparar este té de cúrcuma y ajo, también deberás agregar una pimienta negra, un limón en rodajas, un trozo de jengibre pelado y 4 tazas de agua.
Para prepararlo, primero debes poner a hervir el agua en una olla y cuando rompa el hervor, añade una cucharada y media de cúrcuma en polvo, un diente de ajo, y el resto de ingredientes.
Cocina durante 10 minutos, para que de esa manera todos los ingredientes se infusionen bien. Cuela antes de servir y si quieres puedes endulzar este té con miel.