Si sumamos las estadísticas mundiales son incomparables, ya que está reflejado que son muchísimas más las personas las que practican el correr por encima de quienes realizan yoga, esta última modalidad que se ha puesto más de moda en la actualidad con respecto a décadas pasadas.
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Pero cuando se quiere mejorar la velocidad y, sobre todo, el alcance de kilómetros cuando se corre, es allí cuando ambas actividades se pueden potenciar si se siguen con buen criterio las diversas recomendaciones que existen al respecto, por ejemplo, los considerados runner pueden mejorar con clases de yoga los fondos o las pasadas cuando se trota.
Actividades aliadas
Al practicar el yoga, la columna y la espalda se mantienen saludables, sin tensiones ni dolores, motivos por los cuales cuando se corre se evitan mayormente dichas molestias y puede ser disfruta en su máxima expresión.
“El corredor que practica yoga sabe respirar y usa su capacidad pulmonar a su favor, tanto en las carreras o entrenamientos como en su vida cotidiana. Además, tiene menos probabilidades de lesionarse, ya que sus articulaciones y músculos están flexibles y sin tensiones”, indica Romina Rondinone, instructora de Swásthya Yoga.
¿En qué ayuda el yoga a quienes corren?
· Aspecto físico, ya que aumenta la flexibilidad, sobre todo, de las zonas que más se contraen al correr: psoas, cuádriceps y pantorrillas. Expande el pecho y la caja torácica y elimina tensiones del cuello y la espalda. También, aporta mayor amplitud articular y trabaja con movimientos de expansión y apertura compensándole al corredor la contracción y el impacto generado en las carreras o entrenamientos.
· En lo emocional, porque el yoga ayuda a administrar el estrés a través de las distintas técnicas de respiración, estabilizando las emociones y aprendiendo a manejarlas en las carreras, en la vida cotidiana, familiar y en la vida laboral o en los estudios.
· Potencia la mente y ayuda a usar esos pensamientos que se liberan corriendo a favor del corredor. Esta práctica les enseña a obtener calidad de pensamientos y a aquietar la mente llegando a obtener estados más profundos de conciencia.
