Un aterrador momento se vivió en el Aeropuerto Ejecutivo de Dallas, en Texas,( Estados Unidos) cuando un par de aeronaves militares que pertenecían a una exhibición aérea chocaron en el aire y a baja altura.
Unos cinco mil espectadores vieron el momento en que una nave Bell P-63 King cobra diseñada para un solo ocupante pasa velozmente y rompe en dos al avión Boeing B-17 Flying Fortress con capacidad para cinco puestos.
Estas reliquias de la aviación pertenecen a la Fuerza Aérea Conmemorativa y realizaban un vuelo de muestra en ocasión del evento Wing Over Dallas, que se desarrolla en ocasión del Día de Veteranos. El show aéreo se programó del 11 al 13 de noviembre, pero la tragedia del día 12 canceló toda la actividad.
Los tripulantes
Hasta el momento se ha confirmado la identidad de dos de los seis fallecidos en el accidente. Se trata de los pilotos jubilados Terry Barker y Len Root. Ambos pertenecían a la Asociación de Pilotos Aliados. Ambos viajaban en el Boeing B-17 Flying Fortress.
“Nuestros corazones están con sus familias, amigos y colegas del pasado y del presente”, dijo el gremio, citó CNN.
Sobre los demás integrantes muertos en el accidente no se han brindado detalles. Hank Coates, presidente y director ejecutivo de la Fuerza Aérea Conmemorativa, dijo que el avión más grande, el B-17, iba con todos sus puestos ocupados. “Eso era lo que había en el avión”, mientras que el Bell P-63 King cobra es un “avión de combate de un solo piloto”. Esta información también fue ofrecida por la oficina del médico forense del condado de Dallas.
“Podemos confirmar que hay seis (muertes)”, precisó.
Un caos en el sitio del impacto
Todo ocurrió a la 1:20 de la tarde del sábado 12 de noviembre. El B17 pasaba a baja altura sobre los espectadores y la pista y de pronto se acerca muy rápidamente el Bell P-63 King cobra en su misma dirección.
El avión más pequeño rompe el fuselaje del B-17 y corta literalmente la cola que se desploma enseguida. Poco después, la nariz del avión cae sin dar tiempo a ninguna maniobra por parte de los pilotos. Los restos volaban por el aire y se escucha una explosión cuando los restos más grandes caen a tierra ante la mirada atónita de los espectadores.
Los escombros del choque se ubicaron terrenos del Aeropuerto Ejecutivo de Dallas, la autopista 67 y un centro comercial cercano, precisó el medio. Más de 40 rescatistas acudieron a la zona cero para realizar las labores de rescate de los cuerpos. La tradicional celebración quedó completamente empañada por la tragedia.
Se conoció que las aeronaves se encontraban en excelente estado operativo pese a su antigüedad. Aunque todavía no hay un parte oficial sobre las causas del choque, todo indica que hubo un error de cálculo sobre la trayectoria de ambas naves en vuelo. Para los organizadores es difícil de explicarlo debido a que los pilotos son gente debidamente entrenada para este tipo de maniobras.
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