El contacto físico es vital para las personas. Así lo recalcan expertos, quienes aseguran que por ello, las caricias son fundamentales en las parejas. Una relación en la que no se toquen, es muy probable que ya no esté funcionando o que vaya a pique.
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Universalmente, las caricias son una muestra de amor y cariño. Solo se reciben si hay consentimiento y un sentir mutuo. Un toque de tu pareja refuerza la autoestima, relaja y dependiendo de la zona del cuerpo, puede excitarte sexualmente, reforzando así la relación.
Las caricias no necesariamente son para ir directo al acto sexual. Un toque de las manos, de la pierna, de la cara o los besos cuando se está en el compartir o en las tareas diarias, pueden demostrar ternura y amor.
Sin embargo, aunque tocarse no implica que hay que ir directo a la cama, una pareja que se acaricie tierna y constantemente sin inhibiciones, es señal de que todo está bien en su intimidad.
El portal Psicólogos Princesa 81 reseñó que un estudio de la Universidad de Oxford del Reino Unido y de Alto en Finlandia determinó que sin importar la cultura, “tocar es una manera muy importante de establecer relaciones sociales”, esto en las palabras de la investigadora finlandesa Juulia Suvilehto.
“Cuanto más placer cause tocar un área específica del cuerpo, seleccionaremos más a quien dejemos que la toque”, dice el referido medio que destaca que hay una gran diferencia dependiendo del área del cuerpo que se acaricie.
“Cuanto más íntima sea el área del cuerpo permitida al tacto, mayor será el vínculo emocional con la persona a la que se permite tal contacto”, resaltó.
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Consecuencias de la falta de caricias
El medio Jeymi Febles puntualiza las consecuencias de no manifestar contacto físico a tu pareja y son las siguientes:
-La persona puede sentirse poco amada o valorada
-Puede sentir que ya no te gusta
-Pensar que te desagrada su cercanía
-Experimenta inseguridad emocional en la relación
-Siente que el amor se está acabando o que te estás desenamorando.
Oxitocina
Las caricias liberan oxitocina, conocida como la hormona del amor y el bienestar. Hace sentir placer y confianza entre la pareja.
Indudablemente, cuanto más toques físicos, más fuerte será la relación, por lo que a juicio de expertos, los toques constituyen un poder y una barrera protectora que minimizan las probabilidades de infidelidad.
No dejes que tu fuego se apague y mantén vivo el amor, la ternura y la pasión acariciando a tu pareja.
