Sin duda alguna, el mal dormir es una de las problemáticas más complicada que puede atravesar cualquier ser humano. Por distintas razones médicas y psicológicas, millones de personas alrededor del mundo son incapaces de conciliar el sueño como corresponde, trayendo dicha situación múltiples enfermedades tanto físicas como mentales.
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Una mala noche pueden hacer que te sientas fatigado, molesto y con menos paciencia durante el día, pero también ocasionan que el cuerpo esté desganado y te encuentres más lento a la hora de pensar.
No tener un buen descanso puede tener impactos mucho más complejos en la salud y, según el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS), la falta de sueño es un factor que contribuye al riesgo de enfermedades como obesidad, diabetes tipo 2, diversas enfermedades cardiovasculares, así mismo, Alzheimer, ansiedad y depresión.
Método 10-3-2-1-0
Ante la constante búsqueda entre especialistas para encontrar soluciones a la problemática, Jessica Andrade, médica de Massachusetts en los Estados Unidos presentó el método “10-3-2-1-0″, una innovadora rutina que ayudaría a las personas afectadas a dormir mejor. La doctora Andrade compartió en sus redes sociales el método de entrenamiento del sueño, no obstante, fue clara en advertir que puede no ser adecuado para todos, dependiendo del historial médico. También señaló que cualquier persona que tenga inquietudes sobre sus patrones de sueño debe consultar primero a su médico.
El primer paso del método, el “10″, indica en suprimir cualquier bebida con cafeína, mientras que para el segundo paso “3″ hay que evitar las comidas abundantes y el alcohol desde tres horas antes de acostarte. Dos horas antes de acostarse se debe dejar las tareas laborales y apagar todas las pantallas, incluidos teléfonos, tabletas y televisión, una hora antes de acostarse. “Cero es la cantidad de veces que presionarás el botón de aplazar por la mañana”, explicó Andrade.
“Las bebidas con cafeína desaparecerán del torrente sanguíneo en alrededor de 10 horas y eliminarán los efectos estimulantes. El alcohol afecta el ciclo natural del sueño y reduce la calidad del sueño”, precisó Jessica Andrade.